El 20 de junio del 2020, efectivos del GAD de Lomas de Zamora allanaron una casa de Villa Centenario en busca de los autores de un robo en una escuela del barrio que había sido desvalijada días atrás. Sin embargo, los responsables de la tarea ordenada por la Justicia se habrían equivocado de vivienda y agredieron de un tiro de bala de goma en el rostro a un joven menor de edad que perdió la vista del ojo derecho.

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A casi un año de la brutal agresión, la víctima del caso tuvo que ser internada en una clínica de salud mental de Avellaneda a raíz de los problemas psicologicos derivados de las graves secuelas que le quedaron. Se trata de Ignacio Seijas, el adolescente que tenía 17 años cuando padeció el ataque que le cambió la vida para siempre.

Mientras, el acusado permanece en libertad a pesar de la grave acusación de gatillo facil que pesa sobre él. Así lo afirmó al aire del programa Política del Sur la madre de “Nacho”, Marina Candia, quien señaló que su hijo “no se pudo recuperar aún”, mientras que el autor del ataque se encuentra libre.

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Según contó a este medio, el joven “se estaba recuperando” y “levantando su ánimo” gracias a la colocación de una protesis en la cara. A pesar de los vaivenes animicos, la situación “era controlable”, hasta que protagonizó un nuevo episodio de violencia que provocó otra vez un giro rotundo en su actitud.

“Hace tres meses él tuvo una pelea con un vecino, por eso lo llevan a la Comisaría de Villa Centenario donde le pegaron una paliza tal que le dañaron toda la protesis. Desde entonces no volvió a ser el mismo”, lamentó la mujer sobre el hecho que habría origindos un serio cambio en el día a día del joven.

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De acuerdo al relato de Candia, a partir de entonces, su hijo comenzó a mezlcar las pastillas recetadas por el médico con alcohol. “Desde que le pegaron en la Comisaría se hizo incontrolable, comenzó a refugiarse en las drogas y con gente que no tenía que juntarse”, manifestó.

 

“Están desesperante su situación que tuve que pedir su internación porque la semana pasada trató de lastimar al padre porque no lo dejaba salir a la calle”, describió.

 

El allanamiento de la brutal agresión

En el informe policial del operativo realizado en el marco de la investigación del robo a la Escuela 26 de Villa Centenario, que había sido desvalijada, los efectivos manifestaron que la víctima se habría “avalanzado” hacía uno de ellos con un arma blanca, incluso desobedeciendo la ordel de alto.

No obstante, desde el entorno cercano de la víctima hablan de gatillo facil y afirman que el chico usaba un cuchillo tramontina “como picaporte” para habrir la puerta de su habitación.

La causa es investigada por el fiscal Sebastián Bisquert de la UFI 8 de Lomas, especializada en delitos vinculados a la violencia institucional del Departamento Judicial de Lomas de Zamora. 

El acusado permaneció algunos meses detenido hasta que la jueza Marisa Salvo ordenó su excarcelación a mediados del año pasado. Desde entonces, el imputado Daniel David Antonio se encuentra libre.

 

La Comisaría en la mira de la Justicia

A principios de abril, La UFI 8 de Lomas de Zamora ordenó el allanamiento de la Comisaría de Villa Centenario y el Comando de Patrullas en busca de tomar declaraciones e información por un caso de resistencia a la autoridad que habría terminado en “apremios ilegales”, según la denuncia.

De acuerdo a lo relatado por Ignacio Seijas, este habría protagonizado una pelea con otro vecino del barrio. Por ende, habría sido llevado hasta la Comisaría 7°, donde habría sido golpeado por los efectivos.