El juicio por el crimen de Zamira Domínguez entró en su recta final tras los alegatos de la audiencia del miércoles, donde el fiscal Andrés Santos Procopio pidió prisión perpetua para el padrastro de la víctima y 21 años de prisión para su madre.
Los imputados Brandon González (23) y Brenda Fernández (25), podrían ser encontrados culpables de los delitos de “homicidio agravado por alevosía y ensañamiento” y “abandono de persona y lesiones leves seguido de muerte agravado por el vínculo”, respectivamente, tal como planteó el representante del Ministerio Público Fiscal.
Ambos detenidos pidieron declarar luego de dar por terminada la etapa probatoria del caso, previo al veredicto del Tribunal Oral en lo Criminal (TOC) 9 de Lomas de Zamora.
Por esa razón, en la próxima jornada prevista para el martes 16 de agosto, en primera instancia se escuchará la palabra de ambos y luego los jueces darán a conocer el fallo. Mientras tanto, la espera se hace interminable para los familiares de la nena de 5 años que fue asesinada en 2018 en Monte Grande.
"Esto es un tormento interminable para nosotros, solo queremos justicia", expresó a Política del Sur la tía de la víctima, Adriana Libonatto, quien se mostró conforme con la pena solicitada para los dos.
Junto a familiares de otros hechos similares que acompañaron el reclamo de justicia, como los abuelos de Lucio Dupuy, realizaron varias manifestaciones para visibilizar el caso en la puerta de los Tribunales de Lomas de Zamora durante el desarrollo del juicio.
Zamira Domínguez tenía 5 años y era sordomuda, por lo que se expresaba a través de señas. Sin embargo, la Justicia no hizo lo suficiente para salvarle la vida pese a las denuncias por maltratos del entorno paterno de la niña.
El viernes 28 de septiembre del 2018, la nena llegó muerta al Hospital Santamarina de Monte Grande. Su mamá, Brenda, dijo que "se había caído" y que cuando fue a verla al sillón donde dormía notó que había vomitado varias veces, que le salía espuma por la boca y la lengua "se le había dado vuelta".
Los médicos notaron los signos de violencia inmediatamente y dieron aviso a la Policía. Además, un informe posterior confirmó que presentaba hemorragias internas en el hígado y los riñones
Al principio, las principales sospechas apuntaron hacia González, quien era pareja de la madre y quedó detenido horas más tarde del homicidio, mientras que el arresto de Fernández se ordenó en abril del 2019, al considerarla cómplice.