Familiares y amigos de Fernando González, un joven asesinado a la salida de una fiesta en Villa Fiorito, convocan a una marcha a los Tribunales de Lomas de Zamora para expresar su disconformidad con el desarrollo de la causa, que tiene un solo acusado tras las rejas, mientras que el otro cumple arresto domiciliario.

La actividad consistirá en una concentración en la puerta de entrada del Departamento Judicial, este viernes a partir de las 10.

"Queremos pedir que vuelva a estar detenido, ya que no llegó a cumplir ni un mes y le dieron el beneficio de la pulsera. No sabemos por qué. Tal beneficio tarda hasta ocho meses", expresó Fernando, amigo de la familia de la víctima, en diálogo con Política del Sur, al hacer referencia sobre el imputado Ricardo Blanco (22), quien cumple prisión preventiva en su casa.

Se trata del imputado considerado cómplice del presunto autor del asesinato, Bruno Godoy (26), quien se encuentra privado de su libertad.

El Juzgado de Garantías 3 de Lomas de Zamora había dispuesto que continuaran tras las rejas. Sin embargo, la defensoría interviniente logró el beneficio para uno de los dos sujetos procesados por el hecho ocurrido la madrugada del 8 de octubre pasado.

Ambos están acusados de los delitos de "homicidio agravado" y "lesiones graves", tal como lo dispuso la fiscal Silvina Estévez, de la UFI 4 de Lomas.

"La fiscal tenía que haber apelado, pero no mueve un dedo. Solo quiere que nos quedemos y que no se haga justicia, ya que para ella es uno más en su lista para archivarla, pero nosotros no lo vamos a permitir", señaló Fernando.

El crimen de Fernando González

González fue herido de muerte en Quesada y Morazán, durante la madrugada del 8 de octubre pasado, cuando quiso rescatar a su amigo, llamado Cristian, quien fue alcanzado por varios impactos de bala, pero sobrevivió al ataque.

Todo empezó en una fiesta de cumpleaños, donde la víctima fatal había ido con su hermano menor y unos amigos. En un momento apareció un conocido del barrio y empezó a agredir al hermano de González, aunque lo peor estaba por venir y siguió afuera.

El joven recibió un tiro que le traspasó el brazo y le ingresó en el pulmón, lo que le provocó la muerte en pocos minutos, a pesar de que fue llevado de urgencia al Hospital Gandulfo de Lomas.