La causa que investiga el crimen de Juan José Ledesma, asesinado a puñaladas en su casa de Ezeiza ahora tiene un nuevo capítulo: la familia de la víctima denuncia que la acusada vende certificados médicos truchos mientras cumple arresto domiciliario por el hecho ocurrido en julio de 2021.

"Quiero que la Justicia se apure y que el beneficio que se le dio cambie y este en un penal como corresponde. Con beneficios se tiene que hacer buena letra y vender certificados truchos no es hacer buena letra", expresó al programa Política del Sur la madre del fallecido, Norma Beatríz Arbel, quien realizó la denuncia en la UFI 2 de Ezeiza.

Según contó la entrevistada a este medio, la imputada, Sabrina Farías, permanece con prisión domiciliaria, a la espera de ser juzgada por el asesinato de su hijo. Sin embargo, mientras tanto se le atribuye otro delito que podría dar un giro a su situación procesal.

Por ahora, la última novedad del caso es que la causa fue elevada a juicio, aunque resta conocer todavía la fecha de inicio de los debates y cuál será el tribunal a cargo de llevar adelante el proceso judicial.

Farías, quien afirmó que actuó en defensa propia, fue beneficiada a raíz de que estaba embarazada al momento de aquel episodio que se le atribuye como autora. No obstante, luego de dar a luz, siguió en la misma condición.

"Gracias a Dios y a seguir luchando, mi nieta está con nosotros. La tenencia se la dieron a mi hija, tiene todos los beneficios que merece y todo lo que tenemos va a ser para ella, es lo que hubiese hecho mi hijo", explicó Arbel al ser consultada sobre su nieta.

El crimen de Juan José Ledesma

Ledesma murió el 31 de julio de 2021 luego de una agonía de más de 20 días a raíz de las puñaladas que le provocaron graves heridas. La acusada, Sabrina Farías, quien era su pareja, fue beneficiada con el arresto domiciliario debido a la gestación de su embarazo.

Según presume la fiscalía a cargo del caso, Farías, que cursaba el quinto mes de embarazo, arrinconó a Ledesma en la habitación que compartían y lo apuñaló tres veces luego de una discusión. 

La investigación llevada adelante por la fiscal Lorena González de la UFI 3 de Ezeiza reveló que al momento del homicidio había cuatro menores que presenciaron el hecho.