El concejal por Avellaneda Puede, Lucas Yacob, criticó el Presupuesto 2023 que fue aprobado en la última sesión ya que evaluó que la distribución de partidas “no representa los verdaderos problemas de los vecinos”.

“Van a invertir solo el 3% en seguridad. En 2023 Avellaneda va a gastar más en el museo del futbol que en cuidar a los vecinos. Son 1.600 millones en seguridad y 2.000 millones en el museo”, aseveró el también dirigente del PRO en diálogo con Política del Sur.

Además, cuestionó la ordenanza Fiscal Impositiva 2023 al considerar que “es una locura el aumento de los impuestos en un 89% de una sola vez a partir de enero, es un golpe grandísimo a los bolsillos de todos los vecinos”.

Añadió que “el 84% de aumento de impuestos de un día para el otro es impagable. Quien paga $5.000 de Tasa de Servicios Generales va a pagar $9.200 a partir del 1 de enero”.

Otra vez Avellaneda es noticia nacional por ser una ciudad invivible. No hay un plan ni voluntad para combatir el delito. ¿Cuantos hechos más vamos a lamentar? @SergioBerniArg @jorgeferraresi . Mis condolencias a la familia de Tomás. pic.twitter.com/CuMpIejLnb

— Lucas Yacob (@LucasYacob) November 7, 2022

“El discurso berreta de cobrarle más a los que más tienen es solo para la tribuna, este aumento es para cada rincón de Avellaneda por igual. Esto va por encima de la inflación prevista por el ministro de Economía de la Nación, Sergio Massa para el 2023, que previó un 60%”, subrayó.

Regulación de panaderías

Yacob, por otra parte, se refirió a la regulación para la habilitación y funcionamiento de panaderías y afines a cargo del municipio ya que fue el único que votó de forma negativa.

“La ordenanza me parece excesivamente arbitraria, anclándose a una ley provincial de hace 20 años. Según la normativa el municipio podrá poner límites al número de habilitaciones para vender pan de acuerdo a una relación de habitante-comercio que no sabemos cuál es”, indicó.

Y completó: “En este momento de crisis, lo menos que podemos hacer es pedirles a los comerciantes que no abran porque hay muchas panaderías. Los dirigentes deberían enfocarse en que el pan no aumente en vez de hacer estas cosas, hoy la gente la está pasando mal”.