La concejal de Avellaneda del Frente de Todos Nancy Guzmán salió al cruce de las habituales críticas de la oposición contra la gestión comunal al recalcar que en el Municipio “hay un Estado presente, con mucha conciencia, responsabilidad y que trabaja para el bienestar del vecino”.

“En Avellaneda contamos con un Estado presente, que desarrolla sus capacidades y que siempre abraza y contiene a los vecinos y las vecinas para el desarrollo integral. Siempre con mucha conciencia y responsabilidad de todo el escenario político que ocurre a nivel nacional y obviamente, regional”, recalcó la edil en diálogo con Política del Sur.

Consultada sobre los arreglos de la calle Fabián Onsari, Guzmán señaló que “se están realizando las obras de mejoramiento y repavimentación”. En este punto, subrayó: “A solicitud del Ejecutivo, aprobamos un proyecto que tiene el objeto de eximir de la tasa por inspección de Seguridad e Higiene a los contribuyentes que desarrollan su actividad en la zona, obviamente con carácter temporario”.

“Sabemos que puede ocasionar cierto inconveniente para el desarrollo de la actividad comercial, pero luego va a redundar en mejor calidad de vida y obviamente en el mejoramiento integral”, enfatizó

“Punto de inflexión”

Luego, Guzmán analizó lo que fue el intento de magnicidio a la vicepresidenta Cristina Fernández de Kirchner y evaluó que es “un punto de inflexión”. “Nos exige estar a la altura de las circunstancias. Lamento quienes no se pronunciaron en ese sentido porque realmente es una falta grave. Dudo que cambie el discurso de una gran parte de la oposición que continúa desentendiéndose del tema”, criticó.

Asimismo, consideró que “en la oposición no están dispuestos a dilucidar las consecuencias relevantes que derivan en parte de la sociedad con estas campañas de odio instaladas para desacreditar, estigmatizar a Cristina y líderes populares”.

“No quieren debatir sobre el lawfare que es un mecanismo que se hace para proscribir a líderes populares y que ha comenzado ya en la región y lo hemos visto cuando encarcelaron a Lula, después el golpe de Estado en Bolivia y continuó en Argentina. Todos debemos pronunciarnos en ese sentido”, concluyó.