

Los vecinos de la localidad de Wilde todavía permanecen conmocionados por el crimen de Antonio Nicolás Carrona, el jubilado de 85 años encontrado asesinado el sábado en el patio trasero de su propiedad, mientras se conocen más detalles alrededor del hecho.
Ahora se conocieron testimonios de la hija de la víctima y madre del supuesto asesino, Damián Rodrigo Tello (35), quien atendió a los efectivos de la Policía Bonaerense y les abrió la puerta de la casa que compartía con su abuelo. En el patio trasero se confirmó el hallazgo macabro del cuerpo oculto debajo de adoquines.
Según declaró ante la prensa la madre del artista acusado, el tatuador de 35 años le confesó el crimen cuando, esposado, salía de su casa para entrar en el patrullero. Los Carrano responsabilizan a la inacción del Estado en el tratamiento de la salud mental de Damián, ya que aseguran que el detenido sufriría un trastorno, aparentemente, diagnosticado y que, pese a los numerosos intentos por lograr que lo internaran durante un período prolongado, encontraba la manera de abandonar los tratamientos, dejando de tomar su medicación.
El imputado se recibió como técnico químico luego de terminar la secundaria y, de acuerdo a su familia, durante unos pocos años integró las filas de la Policía, al igual que su abuelo Antonio. Sin embargo, sus ataques de ira y cambios radicales en su estado de ánimo se fueron agravando cada vez más con el paso del tiempo.
Por esa razón, el papá de Damián Rodrigo Tello logró obtener la tenencia de su nieto a fines del 2020, que había tenido el artista producto de una relación con una pareja marcada por la violencia.
Un familiar del detenido y de la víctima que prefirió mantener en el anonimato le reveló a la prensa: “Nos cansamos y nos cansamos de pedirle a la Justicia que lo mantuviera internado. Pero las leyes son las que hay y, si una persona no representa de manera muy evidente que es un peligro para sí mismo o para los demás, lo dejan todo a su voluntad. A un mayor de edad no podés obligarlo a que se mantenga internado”.
“Entonces, esto que nos ocurrió fue como los casos de las mujeres que denuncian y denuncian a sus maridos golpeadores y después se convierten en víctimas de un femicidio. Nosotros sabíamos que en algún momento podía terminar ocurriendo algo así”, completó.