En Avellaneda, la polémica y los entredichos entre oficialismo y oposición permanecen intactos, producto del desencuentro que generó la aprobación de una ordenanza que tiene que ver con los terrenos de la ciudad, ya que para la oposición es un “avance contra la propiedad privada”, mientras que el oficialismo señala que solo se busca confundir al vecino.

Así, en los últimos días, desde Juntos por el Cambio, pusieron mesas en distintos puntos de la ciudad para juntar firmas y pedir que se derogue la ordenanza, la cual fue motorizada por el bloque del Frente de Todos, algunas sesiones atrás.

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“Lo que hace la oposición es agarrar una parte muy chiquita de la ordenanza y confundir a la gente, no es nada más ni menos que la continuación de la Ley de Hábitat que se promulgo en 2013 en la Provincia”, remarcó el edil Alberto Medaglia en diálogo con Política del Sur.

En ese sentido, el referente del Frente de Todos aseguró que “los municipios no tienen la capacidad de expropiar” y que lo que se va a hacer es un informe concreto sobre la realidad del territorio “para una correcta planificación urbana y, con el paso del tiempo, ver cómo mejorar la situación”.

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“Lo que hace la oposición es empezar su campaña política con esto, solo recorren los medios de comunicación como nos tienen acostumbrados de manera destructiva, confundiendo al vecino; lo que no hacen es estar en el día a día con los vecinos”, fustigó.

Por caso, subrayó que quienes recorren la ciudad “saben que uno de los problemas que tenemos en Avellaneda y la provincia son los baldíos abandonados, las fábricas abandonadas, donde los dueños no se hacen responsables de lo que pasa, el otro día estuvimos en un terreno donde se está por caer un paredón, nadie se hace cargo y luego dicen que es responsabilidad de la Municipalidad, tener un registro nos permite organizar sobre eso”.

Para el legislador, el accionar de Juntos por el Cambio tiene que ver con “asustar” a los vecinos con que “se viene el comunismo, el socialismo y eso no existe en Avellaneda” y pidió que analicen lo que se ha hecho con terrenos que estaban abandonados como la construcción de la Universidad, el espacio donde hoy funciona el vacunatorio, plazas y centros culturales, algo que, según marcó “los vecinos lo saben, más allá de las confusiones”.

En los últimos días, desde el espacio opositor marcaron en diálogo con este medio que el objetivo del oficialismo es usar a la ciudad de Avellaneda “como una prueba” y de ahí avanzar en la expropiación de tierras “en el resto de la Provincia y después en la Argentina”.

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Según consignó Medaglia, esta polémica no va a traer consecuencias negativas en lo electoral para el oficialismo porque marcó que desde el espacio se recorren los barrios y tienen “el cronómetro más cotidiano” donde “nos acercamos a los vecinos, esta información llega desprolija, no se entiende bien y no va a tener un impacto electoral para nosotros”.

Caso contrario, Medaglia aseguró que “lo que si va a tener un efecto es llegar a tener el 80% de los avellanedenses vacunados, seguir inaugurando escuelas y jardines, seguir avanzando en esas cosas que importan a los vecinos y eso va a volcar al electorado a seguir con este proyecto que durante los últimos 12 años cambio la realidad de la ciudad”.