Laura Moyano es representante de la asociación civil "Por el Motociclismo", una entidad sin fines de lucro que trabaja para garantizar los derechos y la seguridad de los motociclistas. En diálogo con Política del Sur, se refirió al trabajo de la organización y analizó las últimas políticas implementadas en materia de seguridad vial.

En este marco, aseguró que “bajar la siniestralidad vial pasa pura y exclusivamente por la educación y después por la fiscalización en la calle". “Tenemos unas leyes maravillosas pero si no se aplican, es un desastre. Si el ser humano respetara el 100 por ciento de las reglas, leyes, ordenanzas, reglamentos y señales de tránsito, los siniestros bajarían un 98 por ciento en un solo día”, afirmó.

Cursos

“Con suerte te morís” se llama el curso que Laura dicta junto a miembros de la organización para jóvenes de quinto y sexto año de la secundaria. Dicha denominación habla del cambio de paradigma que buscan generar sobre la percepción del riesgo que posee la sociedad al momento de conducir.

“El curso se llama así porque por cada fallecido quedan 3 lesionados graves. Tenemos 15 mil personas del año 2021 y nos quedamos cortos, de los que solo se recuperan 5 mil, o sea que nos quedan 10 mil con lesiones de por vida que van desde amputaciones, parálisis, discapacidades y como lo más grave quedan en la cama como un vegetal. Entonces con suerte te morís”, explicó.

Añadió que “antes enseñaban ‘la moto feliz’, por ejemplo, incluso las concesionarias te venden la moto con el casquito, el hombro sonriendo y en verdad no es así; de 10 camas de terapia intensiva siete son ocupadas por usuarios de moto, entonces no es feliz”.

En esta línea, puntualizó que “un motociclista jamás se subiría a una moto sin casco porque sabe las consecuencias y tiene percepción del riesgo”.

“Cuando analizas en profundidad esas siete camas de terapia intensiva, cinco están compuestas de chicos de 21 años que hace menos de un año les diste la licencia y los otros dos no la tienen, entonces está fallando el Estado también en fiscalizar, en el otorgamiento de licencias de conducir”, analizó.

Fiscalización y proyectos

Celebró, asimismo, la Ley de Alcohol Cero en la Provincia y marcó que “Licencia Joven es una muy buena medida, es una política pública a largo plazo que se verá en diez años con chicos que van a tener otra percepción del riesgo porque es muy probable que merme en estos jóvenes que andan en las motitos a una velocidad excesiva y sin casco”.

Asimismo, subrayó: "Ya que fiscalizamos alcohol vamos a fiscalizar la documentación del usuario de moto, el chasis y el motor porque hay un mercado paralelo de venta de repuestos de motos que nadie controla. La Agencia Nacional está capacitando a su personal para esto”.

“De cada 1.000 infractores que no tienen patentes, ni luces, ni cascos, ni registro y ni VTV, tenés 20 delincuentes entonces si a través de la fiscalización ese número de infractores lo reducís a 100 ya es más fácil detectar a los motochorros, te fijás a través de las cámaras, ves una moto sin patente y mandas un escuadrón a perseguirlo”, apuntó.

Por último, señaló que “la Asociación lo que hace es golpear la puerta de todos los políticos con los proyectos abajo del brazo para bajar los siniestros viales”.

“Desde el 2014 estamos tratando de hacerles entender a los políticos que la primera víctima de los motochorros somos los motociclistas porque el delincuente no compra la moto, no la patenta, no paga el seguro y la VTV, no se pone una campera con protecciones. El verdadero motociclista circula con forme a él porque lo último que queremos es que nos toquen nuestro vehículo”, sentenció.