Fuentes de la causa que investiga el crimen de Antonio Carrano, el jubilado de 85 años encontrado asesinado el 30 de julio pasado en su casa de la localidad de Wilde, informaron que hasta el momento se descartó la pericia psicológica del acusado, Damián Rodrigo Tello.

"No sé hicieron pericias psicológicas. Él está bien, pero tiene problemas con las drogas", confiaron a Política del Sur sobre el estado actual del detenido.

Hasta ahora, el acusado se negó a declarar en indagatoria ante la fiscal María Laura Carballal, de la UFI 2 especializada en violencia de género y familiar del Departamento Judicial de Avellaneda-Lanús que intervino en el caso.

Según la autopsia, Carrano tenía "heridas contuso cortantes en el cráneo, una de ellas con hundimiento". Sin embargo, el dato más escalofriante develado fue que el cadáver presentaba "el 80 por ciento del cuerpo quemado y dichas quemaduras fueron realizados post mortem, ya que no hay presencia de humo negro en pulmón".

De acuerdo a los resultados, la data de muerte sería de entre "cuatro o cinco días atrás, en principio", lo que significa que Tello habría permanecido con el cuerpo más de un día.

El caso

Los efectivos de la Comisaría Quinta de Avellaneda se acercaron hasta el domicilio ubicado sobre la calle Caxaraville al 5600, cerca del límite con Lanús a raíz de una denuncia de averiguación de paradero de parte de la hija de Carrano, quien vive en Córdoba y afirmaba que su padre estaba desaparecido hacía varios días. Allí se encontraron con una escena escalofriante.

Según precisaron, los uniformados fueron recibidos por Tello, hijo de la denunciante y nieto del jubilado, ingresaron a la vivienda con "la anuencia del morador y la presencia de un testigo" y luego de una breve visualización del lugar, hallaron "en patio del fondo un montículo de adoquines y al examinar el mismo se observa la presencia de un cuerpo humano", que sería del hombre buscado.

El imputado es técnico químico recibido luego de terminar la secundaria y, de acuerdo a su familia, durante unos pocos años integró las filas de la Policía, al igual que su abuelo Antonio. Sin embargo, sus ataques de ira y cambios radicales en su estado de ánimo se fueron agravando cada vez más con el paso del tiempo.

Por esa razón, el papá de Damián Rodrigo Tello logró obtener la tenencia de su nieto a fines del 2020, que había tenido el artista producto de una relación con una pareja marcada por la violencia.