El 11 de junio pasado, un grupo de delincuentes entraron a robar en la casa de una abuela de 72 años, vecina de la localidad de Dock Sud, quien se habría arrojado del balcón al notar la presencia de los asaltantes. Esa sería la principal hipótesis que maneja la Justicia, aunque desde el entorno cercano de la víctima pusieron en duda esta versión y piden que se agrave la acusación.

"No sabemos si mi mamá se tiró o ellos la tiraron, pero lo cierto es que si esa gente no entraba a su casa, ella estaría viva”, expresó al aire del programa Política del Sur Claudia Gómez, hija de la fallecida Ana Marchán, quien adelantó que en los próximos días podrían hacer una manifestación para pedir el cambio de caratula a “homicidio en ocasión de robo” y la captura de un cuarto sospechoso, que seguiría prófugo.

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Así lo aseguró la mujer en declaraciones a este medio, donde, entre otras cosas, confirmó que por ahora, serían tres los detenidos, pero que habría un complice más que habría sido identificado, pero sigue libre. Es que los presuntos responsables de la tragedia habrían sido descubiertos gracias a las cámaras de seguridad de la zona y el testimonio de los vecinos de la Isla Maciel, barrio donde vivía la damnificada.

Luego de una serie de allanamientos, efectivos de la Policía Bonaerense capturaron a tres de los sospechosos. "Son del barrio estos delincuentes. A las tres horas de lo que pasó sabíamos quiénes eran con nombre y apellido y sabíamos donde estaba el celular de mi mamá", contó Gómez.

De acuerdo a lo señalado por los voceros de la fuerza, el modos operandi particular de la banda era simular que eran policías. Esta sospecha llegó a los investigadores debido a que durante el operativo fueron secuestradas varias chombas con las inscripciones “Drogas ilicitas”en poder de los apresados.

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Consultada la hija de la víctima sobreel curso de la investigación, manifestó estar disconforme con las tareas desplegadas hasta ahora.  "No estamos conformes con la invetigación porque calificaron la causa de robo y fue homicidio", indicó.

Entradera trágica

El viernes a la madrugada del 11 de junio, Ana Marchán dormía en su casa junto a su hijo y su nieto de 11 años hasta que un grupo de delincuentes los despertó a los gritos.

Según el testimonio de Claudia, los malvivientes redujeron a golpes al hombre y le dijeron al nene que se tape la cara con la frazada, por lo que no que no pudieron ver que fue lo que ocurrió con la abuela.

Lo cierto es que la víctima falleció como concecuencia de los golpes producidos por la fuerte caída desde el balcón de la casa, mientras que los ladrones escaparon a bordo de un auto cuya patente pudo ser descifrada gracias a las filmaciones. Esa pista fue la clave para identificar a los imputados y determinar el paradero de cada uno de los miembros de la banda de que simulaban ser policías para cometer sus atracos.

El fiscal Mario Prieto, de la UFI 4 del Departamento Judicial de Avellaneda - Lanús caratuló la causa como "robo", pese a la muerte de la mujer, que perdió la vida en un hospital zonal donde permaneció algunas horas en terapia intensiva hasta que que no resistió más.