Hija del mítico atleta Delfo Cabrera (Oro en Juegos Olímpicos del ´48), Hilda supo honrar un apellido de tamaño peso en la historia del deporte argentino y del peronismo.

Fue el general Juan Domingo Perón, precisamente, quien le dio una casita al atleta junto al Hospital Finocchieto y desde ahí, Hilda Cabrera empezó a recorrer su vida hasta este lunes 24 de mayo, cuando a los 71 años falleció por una enfermedad.

Más allá de todos los reconocimientos post morten de los más altos referentes de Avellaneda, Hilda tenía una historia de lucha política desde lo más temprano de su vida.

Soy Hilda Cabrera, y puedo decirlo porque sé quién soy, y sé quiénes fueron mi madre y mi padre biológicxs.

✋ El 22 de octubre, día Nacional del Derecho a la Identidad #manosconidentidad #Abuelas43Años#LaBusquedaSigue #Identidad pic.twitter.com/1xnYURjMOX

— Hilda Cabrera (@HildaCabrera_) October 22, 2020

Si puede tener un título que la encumbra dentro del distrito es que fue una de las fundadoras de SUTEBA, nada menos, el gremio docente que llegó para consolidarse como una de las trincheras gremiales más importantes de la Provincia de Buenos Aires.

En diálogo con el ex titular de la bancada del PJ y secretario de Finanzas del PJ, Jorge Degli Innocenti, el ex concejal la recordó como “una mujer honesta, gran persona, muy luchadora y siempre comprometida con sus principios”.

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Como concejala, Degli Innocenti, dijo que “fue una defensora tenaz para sostener las posiciones del bloque porque tenía el oficio de las luchas gremiales tanto en SUTEBA como en la CTA”.

Se la recuerda como “solidaria” con todos los segmentos o agrupaciones del peronismo de Avellaneda.

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El “papa”, no dudó en afirmar que “hubiera sido una referente nacional, pero no quiso, eligió la trinchera de base en su territorio”.

Formaba parte del bloque del Frente de Todos, donde desarrolló una intensa lucha por salarios dignos y escuelas seguras, además de estar compenetrada en todos los problemas vecinales. Fue integrante del Consejo Escolar, titular de la CTA de Avellaneda, y concejala. Una inmensa luchadora por los derechos gremiales y humanos.

A punto de comenzar una prometedora jornada de trabajo de la Red Federal de Concejalas de la FAM y del Observatorio de Avellaneda @MSierraDiputada
Acá recibiendo a nuestra Ministra de las Mujeres de PBA @EstelaDiaz63 pic.twitter.com/CMvDHk2mBZ

— Hilda Cabrera (@HildaCabrera_) February 6, 2020

Militantes cuentan de ella que en las carpas de campaña electoral cercanas (en Castelli y Mitre) a SUTEBA, sobre todo en invierno, “siempre estaba dispuesta a colaborar y sus atenciones hacia la militancia joven eran permanentes aportando lo que se necesitara”.

Ejerció como profesora de Educación Física, adoptando así la herencia de su padre en el amor a las actividades deportivas.

Fue también congresal nacional por el PJ de Avellaneda. En la línea de Hugo Yaski tuvo su paso por la Alianza, pero rápidamente volvió al PJ con la llegada de Néstor Kirchner y desde allí sostuvo el proyecto nacional y popular desde el 2003.

En su historia militante tuvo una relación importante en términos gremiales con dos referentes históricos y fundamentales de la lucha gremial en el distrito como fueron Gerónimo Izzeta y  Rubén “Cholo” García.

Por los testimonios recogidos por PDSur se puede decir que no hubo un militante y dirigente del PJ de Avellaneda que no se sintiera “triste y acongojado”.

Con profundo dolor despedimos a nuestra compañera Hilda Cabrera. Fue una militante comprometida como concejala, Secretaria General de la @CTA_Avellaneda y en las calles. Ninguna lucha popular le fue ajena. La recordaremos en cada reivindicación por un proyecto nacional y popular. pic.twitter.com/CeZONZe8IB

— Jorge Ferraresi (@jorgeferraresi) May 24, 2021

Hilda siempre estaba con una sonrisa, podía discutir y pelear, pero nunca renegó de militar y ser parte del peronismo de Avellaneda.

Las muestras de dolor por una partida inesperada no se hicieron esperar y todo el arco político del municipio, desde el oficialismo a la oposición y pasando por todo el arco docente y gremial, hicieron conocer su pesar por la muerte de Hilda y la despidieron con el mejor de los recuerdos hacia una gran luchadora y una hermosa persona.

Hasta el último día en el HCD, defendió las posturas de Jorge Ferraresi y las políticas y derechos de los docentes, sobre todo en pandemia, donde la virtualidad fue y es la bandera de la resistencia al COVID 19. 

Hasta los últimos momentos de su vida, nunca dejó de pasar por SUTEBA, su gran amor de militancia y de lucha junto a los derechos de la mujer.