

Tras conocerse la ratificación de las condenas de los llamados “Usurpadores Vip” por parte de la Suprema Corte, el abogado querellante, Pedro Cruz Henestrosa, se mostró “conforme con la confirmación”, pero indicó no estarlo con las penas que se impusieron. “La sacaron barata”, aseguró a Política del Sur
Las mismas son de tres años para el agente inmobiliario Eduardo Daniel “Dado” Salvadores, 18 meses para la abogada Rosana Paola “Rox” Capotosti (e inhabilitada para el ejercicio profesional por el mismo plazo) y un año para el comerciante Ricardo José “Ricky” Manestar, los tres integrantes de una banda dedicada a estafas inmobiliarias en zonas residenciales de Las Lomitas, Temperley y Adrogué que operaban a través de la falsificación de documentos y ocupación de los inmuebles.
“Temí que (el fallo) pudiera ser revocado porque hace un año la misma corte había decidido abrir dos recursos de quejas presentado por la defensa de Salvadores, el principal imputado en la causa”, contó Henestrosa.
Además, “se les está ofreciendo el plazo para presentar un recurso extraordinario federal ante la Corte Nacional”. El abogado no cree que sea algo que se dé, “pero la posibilidad existe”.
Los “Usurpadores vip” fueron imputados en 2013 y condenados cuatro años después pero las sentencias no quedaron firmes, además, el abogado querellante cree que “al menos desde el 2004 estaban haciendo maniobras de esta índole, no comprobadas en la causa”.
En cuanto al modus operandi de la banda, Henestrosa explicó que “la primera etapa es la del trabajo de inteligencia sobre los inmuebles de elevado valor económico en zonas muy residenciales, fundamentalmente apuntan a aquellos en los que no haya herederos a la vista y puedan quedar para el fisco de la provincia, todo eso lo saben a través de las oficinas de catastro a nivel provincial y municipal y contactos políticos administrativos y judiciales que tienen”.
“Una vez que tienen identificados los inmuebles, seleccionan a determinadas personas para alquilárselos a bajo precio, de esa manera se aseguran que los eventuales herederos no vuelvan a acceder”, continuó.
“Finalmente, cuando entran a las casas se encuentran con toda la documentación de los fallecidos que utilizan para elaborar documentos, pagarés, deudas, testamentos a su favor de manera de inscribir esos inmuebles a su nombre”, concluyó.
Los golpes más conocidos perpetrados por esta banda son el "Caso Lizenciato" por el que se acusó a Salvadores y Capotosti de haber hecho maniobras y falsificaciones de documentos para quedarse con las tres propiedades y toda la obra pictórica de la fallecida artista plástica adroguense Nelia Licenziato; y el “Caso Henderson”, que consistió en la usurpación de la casona del Barrio Inglés de Temperley que perteneciera a la británica Margaret Sheila Henderson, también fallecida.
El abogado señaló que “no hubo investigación que tenga que ver con la eventual responsabilidad de funcionarios públicos en la causa, pero sí han aparecido datos concretos como llamadas telefónicas”, aunque mencionó que “existe una derivación que se está investigando por otra estafa”.