Por: Federico Cedarri

La Cámara de Diputados bonaerense finalmente no logró sentarse para debatir el proyecto de suspensión de las PASO proveniente del Senado: finalmente pasó a un cuarto intermedio para el próximo lunes 28 de abril a las 14 horas.

En rigor, la cuestión de los plazos para la presentación de alianzas y listas nuevamente embarró la cancha y la interna peronista se volvió a colar en el escenario para que se frustrara una vez más la conversión en Ley del proyecto apuntalado por Axel Kicillof.

En la Cámara Alta tanto el cristinismo como la oposición parlamentaria habían bloqueado la pretensión del Ejecutivo de fijar otros plazos para la presentación de listas, basándose principalmente en el pedido de la Justicia Electoral que viene advirtiendo que con la normativa actual será complejo llevar adelante los comicios desdoblados.

El cristinismo advierte que la decisión de no modificar los plazos que sostiene no está pensada para jugar políticamente con una posible candidatura de Cristina tanto a diputada provincial por la Tercera Sección Electoral como a legisladora nacional, sino que pretende que no se modifiquen las reglas del juego y además se lleve adelante una campaña acotada para evitar saturar a la gente en medio de una situación económica difícil.

La Junta Electoral presiona fuerte para cambiar los plazos en sintonía con lo que exige Axel Kicillof, de hecho pretende que los legisladores modifiquen la Ley 5.109 que marca que hay una ventana de tiempo de 60 días antes de las elecciones para presentar las alianzas y 30 días para dar a conocer las candidaturas: el gobernador quiere que se extienda hasta al menos 70 días para la presentación de listas y 80 días para la alianzas.

Esa movida es seguida de cerca por el cristinismo que pretende bascular con las fechas cercanas entre el cierre de listas provinciales, que hasta el momento es el próximo 7 de agosto, y la de legisladores nacionales que será el 17 de agosto.

La presentación el pasado 22 de abril de sendas misivas de la Justicia Electoral en las Cámaras legislativas solicitando una adaptación del calendario electoral motorizó a la comisión de Reforma Política y del Estado que conduce en Diputados el radical, Emiliano Balbín, a acelerar la convocatoria del juez electoral Alejo Ramos Padilla para el próximo martes 29 de abril con la intención de interiorizarse de primera mano sobre el pedido efectuado al Parlamento para modificar la Ley 5.109.

La convocatoria del ente de análisis de Diputados se hace extensiva además para los senadores que integran la Comisión de Reforma Política de la Cámara Alta que conduce la legisladora centenaria Nerina Neumann.

Alternativas en danza

Ante esta presión de la Justicia Electoral comienzan a aflorar distintos escenarios respecto a lo que acontecerá, no solo con la posible suspensión de las PASO, sino también con la determinación de los plazos sobre la presentación de listas y alianzas.

En principio, se aprobaría en Diputados el próximo lunes solamente lo que compete a la cancelación de las primarias para poder comenzar a dar certidumbre  al calendario electoral.

A partir de la sanción unánime que obtendría la suspensión de las PASO en la Cámara Baja quedaría finalmente desestimada la convocatoria para el día 13 de julio, según lo que había decretado Axel Kicillof.

En lo que compete a los plazos electorales, luego del encuentro del próximo martes que sostendrán los legisladores con Ramos Padilla puede darse la particularidad de que Kicillof vete parcialmente la Ley que emerja de la Legislatura y deje vigente solamente el capítulo de la cancelación de las primarias.

De ese modo, ese vacío legal se salvaría con la presentación de otro proyecto de ley del Ejecutivo para que la Legislatura discuta con celeridad plazos más convenientes como lo pide la Junta Electoral y solicita sin disimulos el  gobernador Axel Kicillof.

Habrá que ver cuál es el criterio del cristinismo y la oposición legislativa ante este escenario, porque tanto los legisladores seguidores de Cristina Kirchner como los diputados y senadores del PRO y el abadismo dejaron en claro en reiteradas oportunidades que no están dispuestos a avanzar con modificaciones a la normativa 5.109 durante el año electoral.