La situación económica a nivel nacional es cada vez más compleja y lo mismo ocurre con los trabajadores de la gran mayoría de los sectores sociales. Con el nuevo acuerdo que el gobierno ha creado con el FMI, la incertidumbre es aún mayor.

Rodolfo Aguiar, secretario general de ATE Nacional, habló al aire con Política del Sur acerca de todas estas cuestiones que cada vez preocupan más a la sociedad: “La motosierra empezó a cortar en la Casa Rosada, cortó 10 puntos de imagen del presidente. Imagino entonces que ya no serán del glorioso 56%. Ahora tienen que ser del 42% y esto muestra que hay un creciente y silencioso rechazo al autoritarismo del presidente Milei, que esas expectativas de una buena parte de la población en las que se anclaba este gobierno, son expectativas que están desapareciendo”, expresó Aguiar.

El secretario general de ATE Nacional además hizo referencia a la finalización de 50.000 contratos de trabajadores del estado: “Desde ATE exigimos la renovación automática de todos esos vínculos. Lo cierto es que no se han producido cesantías masivas. Nosotros rechazamos cualquier posibilidad de que se pretenda compensar el costo fiscal que supone bajarle los impuestos a los ricos, como hace este Gobierno. El Estado argentino no tolera un nuevo ajuste. Hoy presta servicios esenciales gracias al esfuerzo de sus trabajadoras y de sus trabajadores. Por supuesto que rechazamos la motosierra. Este gobierno vino a destruir toda institucionalidad. Ellos se asientan en el fracaso democrático”, afirmó.

En ese sentido, Aguiar se refirió a las medidas que toma el Gobierno con respecto a los trabajadores estatales: “En el caso de la planta transitoria, el gobierno se ha caracterizado por vulnerar el derecho a la estabilidad en el empleo público que está consagrado constitucionalmente en el artículo 14 bis. En el caso de las trabajadoras y los trabajadores de planta permanente, en algunos casos ingresan en un proceso de disponibilidad durante un plazo de 6, 9 o 12 meses para ser reubicados en otra área de la administración pública. Este gobierno se ha caracterizado hasta aquí por actuar al margen de la ley, actuar al margen de la constitución nacional”.

Asimismo advirtió: “Nosotros montamos vigilias y no descartamos ocupar aquellas dependencias públicas que efectivamente dejen trabajadores en la calle. Que nadie nos venga a acusar de que nuestra metodología de protesta es violenta o ilegal porque la violencia en este momento en la Argentina es violencia institucional, es violencia que se practica desde el poder y en este caso desde el Poder Ejecutivo”.

Con respecto a la medida de fuerza impulsada por la CGT y las movilizaciones de las próximas semanas, expresó: “En principio yo creo que la gente ya no le cree y le está perdiendo el miedo al gobierno. La represión y ese protocolo antimovilización inconstitucional de Patricia Bullrich ya no tienen sentido. El paro de 36 horas va a ser contundente porque hace muchos meses que hay condiciones y sobran motivos para ir a una huelga general”.

En esa misma línea remarcó: “Acá no la estamos pasando mal solo los estatales. Están destruyendo puestos de trabajo en el sector público pero también en el sector privado. Los comerciantes no le venden nada a nadie. Los pequeños y medianos empresarios se están fundiendo. Las economías regionales se encuentran devastadas. Es cada vez más evidente el rotundo fracaso del programa económico de este gobierno nacional. La necesidad de recurrir a un nuevo endeudamiento con el FMI es prueba de ese fracaso”.

Y destacó: “ Hemos ido perdiendo conciencia acerca de cuál es el verdadero valor de nuestra fuerza de trabajo y hoy este gobierno nos está explotando por mucho menos dinero del que dice la ley que tiene que ser”.

Por otro lado, Aguiar se refirió a la próxima movilización de la CGT y el paro general: “Este tobogán en el que en el que pareciera haber ingresado el Gobierno lo construimos nosotros. Lo construimos a partir de todas aquellas acciones que incluso desde antes de asumir el gobierno nosotros fuimos llevando adelante, en nuestro caso las trabajadoras y los trabajadores estatales. El paro general hoy tiene un fuerte consenso más allá de las organizaciones que lo puedan convocar porque el malestar social es creciente en todo el país. Los únicos que atentan contra la República son los delincuentes confesos que habitan la Casa Rosada”.