

Durante un patrullaje de rutina, agentes de las fuerzas de seguridad fueron alertados del hecho delictivo que se produjo en la vía pública. Mediante los dispositivos de videovigilancia municipales instalados en la zona fue posible detectar al automóvil Chevrolet gris que los implicados utilizaron en el robo. Rápidamente, se inició un operativo cerrojo y tras una persecución, el personal policial detuvo a los dos hombres.
La persecucion contó con el apoyo del Centro Operativo de Monitoreo (COM) a través de las cámaras de seguridad municipales.
Los delincuentes quedaron a disposición de la Justicia. Se les secuestró el vehículo —que se determinó que tenía pedido de secuestro activo—, un revólver calibre 38 Special, municiones y las pertenecías de las víctimas.