

Miguel Antonio Coronel, un hombre de 68 años murió en circunstancias que son materia de investigación, y su familia denuncia que fue víctima de un grave caso de mala praxis de los médicos de una clínica de Claypole, que le costó la vida. El 3 de diciembre pasado, fue llevado al Hospital Lucio Meléndez por un fuerte dolor cervical, pero estaba repleto de pacientes, por lo que se dirigió a otro centro de salud.
En diálogo con el programa radial Política del Sur, Miguel Coronel, hijo de la víctima, contó que los profesionales de la salud que atendieron a su padre, desoyeron las advertencias que les hicieron de manera recurrente, a pesar de que su vida corría riesgo.
Al parecer sin sedarlo y sin el aval de la familia, efectuaron la tomografía y en medio del estudio se descompensó y murió en el Centro Asistencial Rossi de Adrogué, donde falleció por la supuesta negligencia.
"Tenemos el testimonio grabado de una enfermera, que nos cuenta que intentaron entrarlo (a su padre) en terapia intensiva para decir que llegó descompensado y que murió durante la noche", expresó el entrevistado.
Miguel y su familia recurrieron a la Justicia, y ahora la causa tramita en la UFI 10 de Lomas de Zamora, bajo la caratula de "homicidio culposo".
"La clínica Modelo Claypole no quería entregar la historia clínica, y cuándo la entrega, no figura nada sobre lo sucedido. Eso hace que los forenses pidan la ampliación para saber quién administró relajantes, si es que se le aplicó", añadió.