En estos últimos días del mes de noviembre, al oír diversas declaraciones, de distintos funcionarios, siento que estamos comprendiendo la moraleja de la famosa "Fábula del Pelotudo" de Roberto Fontanarrosa, homenajeado recientemente.

Para todo aquel que intente entender como se encuentra el sector productivo, estos son los números de la actividad económica registró una caída del 3,3% interanual y del 0,3% respecto al mes anterior. Comparado con el año pasado: 

- Pesca: -25,2%. 

- Construcción: -16,6%. 

- Comercio: -8,3%. 

Los únicos sectores con resultados positivos fueron minería, agricultura, finanzas y enseñanza. 

El INDEC corrigió al alza los datos de julio y agosto, dejando el índice solo 0,6% por debajo del nivel de noviembre del año pasado. Sin embargo, en septiembre se observó un *declive del 0,3%, cortando la racha de dos meses consecutivos al alza. La variación interanual de ese mes mostró una contracción del 3,3%, mientras que en lo que va del año, la economía acumula un retroceso del 3,1%, según el Estimador Mensual de Actividad Económica (EMAE). 

Desde el sector industrial se reporta una crisis profunda: 

- En el último trimestre, el 60% de los gremios registró despidos. 

- Cerraron 1.000 empresas productoras de manufacturas*, principalmente PYMES. 

- Desde diciembre de 2023, se han perdido 40.000 puestos de trabajo industriales*. 

La información surge de un relevamiento de la Confederación de Sindicatos Industriales de la República Argentina (CSIRA), que agrupa a 1.660.000 trabajadores y utiliza datos de la Superintendencia de Riesgos del Trabajo (SRT). Este informe señala que: 

- Un tercio de los gremios denunció dificultades de las empresas para pagar salarios. 

- El 82% informó recortes de horas extras. 

- El 72% reportó suspensiones, licencias y adelanto de vacaciones. 

- El 80% indicó que los aumentos salariales en paritarias se negociaron y pagaron con retraso. 

De cara al próximo trimestre, solo el 7% de los gremios espera una mejora, mientras que el 93% prevé que la situación se mantendrá igual o empeorará.

La producción industrial sigue en caída: 

- El 90% de los gremios relevados señaló un deterioro en 2024. 

- El 70% observó una baja en las ventas. 

- El 80% detectó una reducción de actividad, reflejada en menos horas de trabajo. 

En cuanto al uso de la capacidad instalada, el 92% de las fábricas indicó que la situación es negativa o empeoró durante la actual administración. Respecto a la reciente aprobación de la Ley Bases, el 70% de los encuestados considera que su impacto en el sector industrial será desfavorable.

En septiembre, doce sectores de la economía mostraron caídas respecto al mismo mes del año anterior. Entre los más afectados se encuentran: 

-Pesca: -25,2%. 

-Construcción: -16,6%. 

-Comercio mayorista, minorista y reparaciones: -8,3%. 

-Industria manufacturera: -6,2%. 

Estos sectores, en conjunto, explican 2,7 puntos porcentuales de la caída interanual del EMAE (-3,3%). Otros sectores también registraron descensos: 

- Hoteles y restaurantes: -5,9%. 

- Servicios comunitarios y personales: -5,3%. 

- Electricidad, gas y agua: -4,2%. 

- Transporte y comunicaciones: -1%. 

- Servicios sociales y de salud: -0,5%. 

La situación es particularmente crítica para las PYMES: 

- Se estima que entre 8.600 y 12.000 PYMES podrían cerrar debido a la crisis económica. 

- En 2024, se han perdido 92.000 puestos de trabajo en el sector, de los cuales 40.000 corresponden a PYMES. 

Aunque algunas lograron mantener sus niveles de empleo estables, el 44% reportó una reducción promedio del 21% en su plantilla laboral. Además, solo el 18% de las empresas espera incrementar personal en el próximo trimestre.

De no implementarse medidas urgentes, como levantar el cepo, regular el comercio exterior, reducir los costos energéticos y bajar la presión impositiva, las proyecciones para 2025 son alarmantes: 

- Cierre de 25.000 PYMES. 

- Pérdida de 300.000 puestos de trabajo. 

Con estos indicadores es cuestión de preguntar ¿ si son o se hacen?. Por lo que para la supervivencia del sector es fundamental que la industria nacional reduzca costos relacionados con energía, impuestos e insumos para poder competir. De lo contrario, no podrá hacer frente a la producción china, una de las principales amenazas para el sector. 

La preocupación ya no solo afecta a las PYMES, sino también a grandes empresas. Si el mercado interno sigue entregándose al comercio externo, se perderá una parte significativa de la producción nacional, especialmente en sectores sensibles como textiles, calzado, bienes de capital, muebles, y otras industrias que enfrentan un futuro incierto.