Por: Federico Cedarri

Diciembre asoma como un mes ajetreado en el ámbito de la Legislatura bonaerense ya que hay varias iniciativas en danza que deberán encauzarse antes de que termine el año 2024.

Como informó PDS, el Presupuesto y la Ley Impositiva generan focos de resistencia en el campamento opositor, fundamentalmente entre los ex socios políticos que constituían Juntos por el Cambio: el PRO y el radicalismo.

Los centenarios platearon distintas condiciones para sentarse a negociar, certidumbre sobre el pago de la última cuota del fondo para obras de los municipios y regularizar la situación del IOMA.

El PRO reunió a su mesa chica para analizar los expedientes, se juntaron remotamente el titular partidario bonaerense Cristian Ritondo con los referentes parlamentarios, el  presidente del bloque en Diputados Agustín Forchieri, el de senadores Alejandro Rabinovich conjuntamente con el vicepresidente Segundo de la Cámara Baja, el lanusense Adrián Urreli y quién ostenta misma representatividad en el Senado Christian Gribaudo.

En rigor,  las conclusiones a la que arribaron reforzaron el rechazo hasta el momento intransigente a las dos iniciativas del Ejecutivo, tanto el cálculo de recursos como la Ley Impositiva.

Según se desprende de lo que pudo reconstruir PDS, los amarillos cuestionan severamente la fuerte presión impositiva que entienden despliega el articulado de proyecto fiscal.

"No baja la presión impositiva y los aumentos son por arriba de la inflación que se prevé, no paran de joder a los productores y empresarios chicos”, le cuenta a este portal una fuente parlamentaria del espacio nacido en 2003.

De igual modo, también critican al artículo 163 de la Impositiva ya que denuncian que dota de una supuesta discrecionalidad al organismo recaudatorio bonaerense, ARBA.

En este sentido, los principales referentes del PRO también manifiestan su molestia por los cambios en los topes llevados adelante por ARBA durante el presente año fiscal que fue modificando el valor de los tributos: “Este año no dejaremos que lo hagan al libre albedrio”, sostienen.

Los amarillos sostienen que la propuesta actual si bien no modifica las alícuotas de los impuestos como Ingreso Brutos y Sellos le brinda al Ejecutivo la posibilidad de modificar los topes de facturación.

También hay cuestionamientos al nuevo endeudamiento que solicitó Axel Kicillof de 1, 1 billones de pesos: “Todavía no nos dieron explicaciones de lo que gastaron este año y ya están pidiendo más, porque no recortan el gasto público", se pregunta un legislador amarillo ante este portal.

Los representantes del partido que fundó Mauricio Macri también están en pie de guerra con el gobernador bonaerense por la demora del pago de la última cuota del fondo de obras para intendentes que debió haberse cancelado sobre el filo del mes de octubre del corriente año.

Exigen presupuesto equilibrado

El oficialismo bonaerense ya descuenta que abundarán los impedimentos para lograr la aprobación de los expedientes antes de que termine el 2024.

Desde el PRO hasta el momento no amagan con despuntar cierta flexibilidad para que se pueda avanzar: insisten con que no se reducen las alícuotas ni se afloja la presión fiscal sobre los sectores productivos.

Si bien ha trascendido que el oficialismo buscaría sacar las iniciativas en la primera semana de diciembre, fuentes opositoras descartan ante este portal que se logren acuerdos con tanta celeridad.

Los amarillos sostienen que el único factor que podría comenzar a destrabar los desencuentros lo representará el monto que se ponga sobre la mesa de los intendentes para obras en el año electoral.

Los alcaldes del PRO comisionaron a sus legisladores para exigir que se adecuen los montos a los niveles inflacionarios del 2024 y que se reduzcan las cuotas para saldarlo: "Todavía no cobraron los intendentes la última cuota así que si no nos pagan antes de mitad de año anda a cobrarles en año electoral y más si desdoblan las elecciones”, advierten.

Como insistimos, la verdadera negociación para el gobierno de Axel Kicillof pasará por el saldo del dinero negociable que derramará la provincia hacia las intendencias opositoras, más allá de algún maquillaje que se le practique a la Impositiva y que ajuste hacia abajo los valores hoy previstos.

Se desliza en el ámbito legislativo la presunción de que esta vez el oficialismo  la tendrá difícil para avanzar con el endeudamiento y la ley fiscal que es donde verdaderamente necesita los dos tercios.

En lo que respecta al Presupuesto le alcanzaría al peronismo con el apoyo de los sectores dialoguistas de ambas Cámaras, en Diputados con el bloque de Gustavo Cuervo y en el Senado con el espacio de Carlos Kikuchi,  para sacarlo por mayoría simple.

Se comienza a bosquejar la fecha de 19 y 20 de diciembre para posibles sesiones espejos donde podría tratarse, además del Presupuesto, endeudamiento y Ley Fiscal, reformas al sistema electoral como la posible eliminación de las PASO que tiene amplio consenso entre las fuerzas opositoras y hasta en las filas del mismo oficialismo: el massismo ya exteriorizó su visto bueno para avanzar en la derogación.