Lomas amaneció vestida de gala para lo que prometía ser una tarde completamente histórica. La hinchada mil rayitas tiñó de rojo y blanco las calles del barrio con la ilusión intacta de poder dar el primer gran paso para volver a la Primera Nacional tras seis temporadas.

Durante los primeros 45 minutos, el nerviosismo propio de un partido que se sabe completamente determinante y el estado ansioso de la parcialidad local nos acabó entregando una primera parte muy alejada de la expectativa que uno podia tener en la previa.

Mucha pelota imprecisa en el último tercio de la cancha, mucho dominio de pelota en la parte defensiva de los respectivos equipos y pocos intentos de cara al arco rival. Como era lógico de pensar, ninguno de los dos quiso arriesgarse mucho en un duelo tan parejo.

Una sola ocasión de peligro clara fue para el elenco Mil Rayitas, ya que sobre el minuto 25 en los pies de Emanuel Brondo tuvo la oportunidad de adelantarse el marcador tras un error en el marcaje de Colegiales y una floja salida del arquero pero lamentablemente el goleador de Lomas erró el disparo. En un balance general, Los Andes supo redondear un primer tiempo levemente más claro pero no lo suficiente como para merecer irse al vestuario con la ventaja.

En el segundo tiempo las cosas comenzaron torcidas, una inusual acción tras el saque del centro dejó a Los Andes con un futbolista menos. Facundo Villarreal comenzó a forcejearse con un hombre de Colegiales y en un arrebato, le asentó un golpe de puño que fue visto por el juez de linea quien notificó al árbitro y no dudó en mostrarle el cartón rojo. Lo más lógico hubiese sido la expulsión para ambos jugadores pero Viola sólo decidió expulsar a Villarreal por lo que el dueño de casa debería afrontar todo el segundo tiempo con un hombre menos.

Sin embargo, esto no generó muchos inconvenientes al trámite del partido ya que todo continúo jugandose acorde a como habia sido la primera mitad, con muchas imprecisiones y un Colegiales que no quiso animarse mucho a ir a buscarlo porque se sentía cómodo con el empate en el Gallardón. Poco que destacar en el complemento, únicamente rescatable por el lado Mil Rayitas fue un remate de Lautaro Torres desde afuera del área que pasó cerca del arco Tricolor pero no mucho más, el juego se acabó consumiendo entre la intrascendencia de un equipo que no podía y la de otro que no quería.

Muchas cosas que repensar para el elenco Mil Rayitas que no pudo dar el golpe en el Gallardón para ir más tranquilo a su viaje a Munro. Ahora todo se definirá la próxima semana en el estadío de Colegiales para dilucidar quien será el equipo que ascienda a la Primera Nacional.