Por: Federico Cedarri

La Libertad Avanza continúa en la provincia de Buenos Aires con una minuciosa construcción de sus armados sobre todo en las secciones electorales más populosas como es el caso de  la Primera y Tercera donde el trabajo, según le cuentan a PDS, se vuelve más arduo tomando en consideración que por su caudal poblacional estas regiones son capaces de volcar una elección.

La intención libertaria pasa por abocarse a la consolidación de dos estrategias, apuntar a sumar legisladores nacionales para robustecer las bancadas en el Parlamento nacional y terminar de consolidarse como segunda fuerza en la Legislatura bonaerense durante los últimos dos años de Axel Kicillof.

La proyección de más largo plazo pasa por la aspiración de ganar en el 2027 la gobernación de la provincia de Buenos aires.

Una de las cuestiones que asalta a los violetas y a la que deberán darle tratamiento durante los primeros meses del 2025 tiene que ver con la posibilidad de una alianza de carácter electoral con el PRO.

Si bien cerca del armado Sebastián Pareja le admiten a PDS que se está llevando adelante un trabajo coordinado en los distritos que gobiernan los amarillos y que además hay buena sintonía con el titular provincial Cristian Ritondo, los tiempos que maneja cada fuerza son disímiles.

A los amarillos les urge comenzar a definir una hoja de ruta ante la devastación que les significó la derrota en 2023, además de que como aseguró este portal deben renovar la mayoría de las bancas que ostentan en la Legislatura bonaerense: "Ellos necesitan sí o sí del soporte de Milei para poder salvar algo de lo que pone en juego”, explica sucintamente a este portal un importante operador violeta.

Los mileístas vienen trazando una agenda de más largo plazo, descuentan que el 2025 será todo ganancia para ellos porque sumarán espacios en la Cámara de Diputados nacional y en la Legislatura provincial.

La meta final que trazan los libertarios tiene como casillero de llegada el 2027: "Primero debemos consolidar la cuestión parlamentaria en el Congreso Nacional, blindar al presidente para que gobierne sin ataduras y después pensaremos de acuerdo a los resultados de la gestión en el 2027 donde esperamos contar con el arrastre de Javier”, analiza una fuente parlamentaria de la Cámara Baja ante este medio.

Como explicó PDS hace un tiempo, los libertarios piensan en acuerdos segmentados con los amarillos: la idea pasa por priorizar los consensos en los territorios donde el PRO se hace fuerte y los libertarios despuntan poco armado.

Uno de las opciones que se baraja en el campamento violeta pasa por darle la chance a los alcalde amarillos de tener injerencia en el armado de las secciones electorales donde la fuerza tenga mayor preponderancia, como podría ser el caso de la Cuarta donde el PRO comanda las alcaidías de mayor caudal poblacional como Junín y Pergamino y la Quinta donde direcciona Mar del Plata en una especie de cogobierno con el radicalismo abadista.

Distinta alumbra la cuestión en la Primera Sección donde los amarillos manejan Vicente López con la jorgemacrista Soledad Martínez y San Isidro con el equidistante Ramón Lanús: los posibles acuerdos en el conurbano deberán ser integrales con reminiscencia de lo que acurra en el cierre de CABA.

En rigor, los violetas explican que la idea pasa por separar los acuerdos que se anuden en las Secciones Electorales del interior de las que se conjuguen en el conurbano: “En el interior podemos ceder espacios pero en el conurbano los principales casilleros serán violetas”, desafían.

La provincia de Buenos Aires como objetivo pero con la mira puesta en el 2027

En el campamento violeta tienen expresa conciencia que la desesperación esta vez está del lado del campo del PRO y que La Libertad Avanza utilizará esa confusión emocional que embarga a los amarillos en la confección de un posible acuerdo: “Hay que analizar todas las variantes”, sueltan enigmáticos desde las huestes libertarias.

El objetivo central pasa por sumar legisladores nacionales, sacan cuentas que en caso de ganar las elecciones en el 2025 con la modalidad de boleta única los libertarios podrían llegar a sumar alrededor de 15 legisladores nacionales por la provincia de Buenos Aires, pero también pondrán la lupa sobre el purismo: “No podemos repetir lo del 2023 que se nos llenó de massistas las listas”, avisan.

Más allá de que valoran al PRO y su comportamiento colaborativo durante todo el primer año de Milei, está claro que los espacios que cavilan ceder a los amarillos nos serán generosos.

Arriesgan en el entorno de Pareja que hay que evaluar las acciones a tomar, ya que si en un hipotético acuerdo con el PRO los libertarios deben entegar lugares relevantes, los legisladores pura sangre se verán reducidos a la misma cantidad que podrían colectar si fueran solos a la elección: “Será milímetro a milímetro la negociación”, descuenta un legislador provincial violeta ante este medio.