Por: Ricardo Carossino

Empezó una interna dentro del peronismo para la cual no hay plata y según pudo saber Política del Sur el gobierno nacional no aportaría más que el presupuesto para 3.200 urnas, cuando desde el PJ dicen que se necesitan 100.000, lo que equivaldría unos 600 millones de pesos.

Sin duda es una cuestión no menor en medio de los aprietes del kirchnerismo contra el gobernador de la Provincia de Buenos Aires, Axel Kicillof, que, según un secretario del gabinete bonaerense, “no se va a dejar correr por Máximo (Kirchner)”.

¿Se votará en escuelas, en las sedes de los PJ, en clubes? ¿De dónde surgirán los presidentes de mesa? ¿Cómo se capacitarán? ¿Se les pagará? ¿Se contratará al Correo Argentino para el escrutinio? Son todas preguntas sobre las que ninguno de los involucrados tiene respuesta.

Pero la pelea empezó y sirve para blanquear entuertos que permanecían cubiertos por años de ocultamiento pragmático y que por fin ven la luz a un año de las elecciones de medio término en 2025 y uno de los principales enfrentamientos que ahora se desenterró, es el más enconado de la Tercera Sección Electoral, nada menos que el que protagonizarán el intendente de Avellaneda, Jorge Ferraresi contra el senador provincial de La Cámpora, Emanuel González Santalla.

Ahora La Cámpora puede decir lo que piensa abiertamente y pararse en contra del gobernador bonaerense y el senador puede ya plantear la pelea sin tapujos y retuitear en X un pensamiento de la diputada porteña Paula Penaca: “Me vienen a convidar a arrepentirme. Me vienen a convidar a que no pierda. Me vienen a convidar a indefinirme. Me vienen a convidar a tanta mierda”.

El portal de la compostura ha sido atravesado y directamente usan términos escatológicos para apuntar a quienes acompañan a Kicillof: por caso, Ferraresi. “Bien haría el senador en hablar por él mismo y en lugar de escudarse en las mujeres”, dijo a PDSUR un dirigente peronista que participa del armado del intendente de Avellaneda.

La Patria Grande hermanada 🫱🏻‍🫲🏽

Con @magdysierra celebramos el Día de la Diversidad Cultural en una jornada organizada por la @agevaperonof.

Disfrutamos de expresiones culturales y artísticas como danzas y música en vivo, comidas típicas y stands de distintos países. pic.twitter.com/5e7TosAwQd

— Jorge Ferraresi (@jorgeferraresi) October 20, 2024

Ferraresi apostó, se jugó todo a ganador a las patas de Kicillof sin tener la certeza de que le salga bien. Como dijo otro histórico peronista de Avellaneda a este medio: “A él (Ferraresi) le interesa más sacarse de encima al pibe de La Cámpora (González Santalla) que Kicillof sea presidente. Él piensa en su propio armado en Avellaneda y en cómo acomodar a su mujer (Magdalena Sierra), que hay que decir la verdad, acá en el peronismo no la quiere nadie porque es impresentable”.

Por lo que cuentan a este medio vale comparar la conducta de Ferraresi con el tango “Por una cabeza” para definir lo que el intendente se está jugando. Si gana Ricardo Quintela es todo para él, pero si hay unidad o pierde, ¿podrá el intendente armar una lista propia de concejales en 2025? Aunque el verdadeo sueño de Ferraresi sea el como gobernador y su esposa como intendenta de Avellaneda. 

“Basta de carreras, se acabó, la timba, un final reñido ya no vuelvo a ver, pero si algún pingo llega a ser fija el domingo, yo me juego entero, qué le voy a hacer”, dice el tango de Carlos Gardel y ahí está el gobernador tentando al intendente para lograr que Magdalena Sierra tenga un lugar importante en una lista para 2025.

¿Y si pierde? No sería descabellado que La Cámpora se facilite a sí misma acuerdos para por fin sacar a Ferraresi del poder en 2027 y esa es la poderosa amenaza que el intendente siente pendular sobre su cabeza: una gran alianza local en su contra, un verdadero motín a bordo.

Hay sectores locales de otros partidos que podrían acordar en contra de determinados intereses si hay órdenes de la superestructura, si Cristina Fernández se queda con el PJ nacional, con la clara intención de manejar el lápiz.

Ese es el riesgo político que puede jaquear el poder local de Ferraresi este año. Y González Santalla no lo va a desaprovechar. Dos claro ejemplos de las intenciones de La Cámpora quedaron plasmadas en Lanús y en Hurlingham, dos municipios en los que un intendente peronista padeció el poder de Máximo Kirchner y es lo que Ferraresi teme.

La visita de Cristina a la Universidad de Avellaneda como dirigente de máximo peso en un segmento del peronismo fue inesperada y levantó el precio de uno de los principales adversarios de Ferraresi como es su rector Jorge Calzoni.

Según una lectura de un dirigente del Frente Renovador de Morón para PDSUR, si no hay internas puede haber tres listas en 2025, que es muy probable que pase, y en ese caso la pregunta es cómo se acomodarán los acuerdos en los pueblos lejos de la lógica de los diputados nacionales.

En esa lógica local la pregunta que se hacen en el PJ es cómo jugara el massismo de Avellaneda. Si jugará por su cuenta en lista del FR, o si armará una alianza con algunas de las otras dos listas: la del kicillofismo y la del camporismo.

Me vienen a convidar a arrepentirme
Me vienen a convidar a que no pierda
Me vienen a convidar a indefinirme
Me vienen a convidar a tanta mierda

— Paula Penacca (@PaulaPenacca) October 19, 2024

Por lo pronto, Ferraresi ya pagó apoyos y Baldomero Cacho Álvarez de Oliveira será candidato a Consejero Titular en la nómina que acompaña al Gobernador Riojano, junto al ex sciolista Alberto Pérez, dos de las caras del Peronismo Bonaerense, agrupación que se presentó en julio en Avellaneda y desde donde construyen una futura candidatura a gobernador del intendente local.

Este peronismo bonaerense tiene en Lanús su representación en Omar López, ex integrante de Juntos por el Cambio y en su momento opositor acérrimo del ex intendente Darío Díaz Pérez tal como también lo fue el actual intendente de La Cámpora, Julián Álvarez.

A priori, si se piensa desde la lógica de Sergio Massa, el Frente Renovador de Avellaneda tendría que hacer lo que más le conviene al líder: dividir para reinar. No entrar en la interna del PJ si se dirime en las PASOS.

Pero como lo ven muchos que conocen a Ferraresi, es muy posible que el intendente trate de interceder para torcer la balanza a su favor y sus influencias políticas estarán listas para ampliarse con favores de todo tipo y es muy probable que tenga una larga cola de personas interesadas en la caja municipal.

Esto duele en La Cámpora que salió a atacar. “Si muerden es porque huelen el peligro”. Las encuestas ya no le sonríen a la ex vicepresidenta y mucho menos a su hijo, por eso, según dijo un dirigente de Lanús, pegan cada vez más.

Esta pelea se declaró hace un mes entre el intendente y el senador provincial. En ese momento, ante las críticas de Ferraresi a la ex presidenta de la Nación, el dirigente de La Cámpora le contestaba: “Nos preguntamos si el método (de CFK de poner candidatos) está mal cuando se elige a uno y bien cuando se elige a otro. Nadie le quita a Ferraresi sus méritos, pero sus groseros errores de caracterización política y económica advierten un deterioro notable en su condición de dirigente local. Es necesario analizar la política con su contexto para no derivar en conclusiones vagas y equivocadas, y a todas luces, de mero interés personal y especulativo (en clara referencia a la imposibilidad de ubicar a Sierra en lugares más importantes en términos legislativos)”.

Gracias al rector Jorge Calzoni por el recibimiento y a todos y todas por el cariño.❤️ pic.twitter.com/VPZwQwAFYf

— Cristina Kirchner (@CFKArgentina) October 18, 2024

Es el estilo camporista. Pegar primero, preguntar después. Pero esta es, la gran desventaja de González Santalla es que no hay caja tentadora. Apenas cuatro municipios que respaldarán esa campaña: Lanús, Quilmes, Hurlingham y Bahía Blanca. Hay otros, claro, pero en rigor tienen menos plata que el PJ de Purmamarca.

A propósito de Jujuy. En esa provincia quedó en evidencia el pragmatismo contrario a la pureza ideológica que intenta transmitir La Cámpora. En su momento cuando el titular del PJ de Jujuy, Rubén Rivarola, acordó con Gerardo Morales el apoyo para la reforma constitucional, el partido se intervino. Uno de los interventores fue y es Aníbal Fernández, ácido crítico de Máximo Kirchner y de CFK.

Sin embargo, el ex ministro de Néstor Kirchner fue invitado por Cristina Fernández junto al otro interventor, Gustavo Menéndez, para hacer un acuerdo nada menos que con Rivarola para pelear el PJ de Jujuy. Esto es política real y al cabo lo que le piden a Máximo y su mamá desde varios sectores del peronismo no K, es que se hagan cargo del pragmatismo que ocultan.

En esa lógica se moverá La Cámpora en Avellaneda y no tendrá pruritos en intentar cerrar todos los acuerdos posibles con cualquier fuerza para sacar del juego al intendente, que jugará el mismo juego. A los opositores de ambos espacios les llegó el momento de pedir.