domingo 03 de noviembre de 2024 - Edición Nº2160

Provincia | 14 oct 2024

Interna peronista

El kicillofismo busca aprovechar la irrupción de la boleta única de papel para desmarcarse de la influencia cristinista

Al caber la chance concreta de que se vote con el sistema tradicional para cargos provinciales, los intendentes cercanos al Gobernador buscarán tener mayor influencia en la confección de listas seccionales. El camporismo admite que sin el arrastre de Cristina le será difícil mantener la hegemonía de la birome.


Por: Federico Cedarri

La interna que sacude al peronismo bonaerense escribe más capítulos que van desenvolviéndose al compás de la vorágine del tiempo político que se avecina.

Máximo Kirchner buscó con poco exito sumar a los presidentes locales del PJ bonaerense al operativo clamor de la candidatura de Cristina al Consejo Nacional.

El posicionamiento de la ex presidenta para ocupar el cargo partidario más relevante en la calle Matheu sorprendió de sobremanera el ánimo en el Palacio de calle 6: el gobernador estaba trabajando en el apuntalamiento del riojano Ricardo Quintela para el puesto mayor nacional.

Si bien Cristina nunca concibió al PJ como un instrumento que la encandilase, en esta transcurrir de la coyuntura política le sirve de plafon para volver a tener plena incidencia en el desenvolvimiento del juego peronista.

La tensión política luego del acto de Máximo en Atenas no cedió un ápice, de hecho espadas cercanas el gobernador Kicillof habría dejado trasuntar cierto enojo con los ministros cercanos al camporismo que no concurrieron a los plenarios que se llevaron a cabo en Florencio Varela y Mar Chiquita.

Lo cierto es que en la gobernación provincial por el momento predomina la cautela y no buscarán atizar el fuego interno: la presencia de Cristina en el tablero del peronismo nacional podría convertirse en un instrumento condicionante para una potencial candidatura del gobernador hacia el 2027.

“Esto de Cristina en el PJ nacional es para embarrarle la cancha a Axel”, analiza ante PDS un legislador peronista cercano al armado kicillofista.

El gobernador bonaerense se distanciara por el momento de la chance de apoyar a Ricardo Quintela, más allá del juego que esgrima algún alfil de su armado como el intendente de Avellaneda Jorge Ferraresi que lo recibió recientemente en su terruño.

El avellanedense es alguien que ya cruzó el rubicón de la desconfianza con Cristina Kirchner, fue eyectado hace tiempo del Patria y tiene en su pago chico la férrea oposición de un lugarteniente de Máximo Kirchner, el senador provincial Emmanuel González Santalla.

La incidencia de la boleta única en el proceso bonaerense

La irrupción abrupta de la boleta única de papel posicionándose como nueva herramienta electoral para los cargos nacionales vino a introducir un condimento especial a la ya agitada interna peronista.

El probable desdoblamiento electoral o la chance de un comicio con impronta  concurrente como ocurrió en CABA durante las últimas elecciones cambiarán de cuajo el tradicional esquema de boleta sábana.

Es que podrían convivir en la misma jornada dos elecciones totalmente distintas, se votaría a diputados nacionales en un cuarto oscuro con boleta única de papel y existiría al mismo tiempo otro habitáculo donde se sufragaría de la manera tradicional.

En el kicillofismo esperarán un tiempo prudencial para tomar una resolución sobre cómo afrontar la futura elección de medio término.

Pero algunos legisladores ligados a los intendentes que arman para el gobernador creen ver una oportunidad única de despegarse del camporismo a partir de este nuevo sistema.

Es que las listas seccionales estarán separadas de la nacional por lo que el posible efecto arrastre que pudiese tener una candidatura de Cristina Kirchner quedaría diluida.

Entienden en la gobernación bonaerense que este factor contribuirá de sobremanera para despejar la influencia que el kirchnerismo y la propia Cristina venían desplegando en los últimos cierres de listas  monopolizando los principales casilleros para los referentes de la orga.

A partir de ahora, los intendentes tendrían un mayor poder en lo que respecta a su injerencia en las boletas seccionales.

“Antes nos extorsionaban con el arrastre de Cristina pero ahora no va a pasar eso si es que decide jugar”, desliza una fuente parlamentaria ligada al gobernador.

En el camporismo mientras tanto esperarán en primera instancia la decisión que tomará Kicillof respecto a cuándo llevará adelante los comicios, esperan que el gobernador consulte a todos los sectores del peronismo para tomar la crucial decisión.

“No nos asusta que no tengamos efecto arrastre si se postula Cristina, nosotros tenemos armados territoriales y sería una buena prueba”, explica el cuadro de situación ante PDS una espada camporista de la Legislatura provincial.

En rigor, en la trinchera de la orga admiten en voz baja que en caso de que Cristina sea de la partida en la boleta de diputados nacionales perderán un importante apalancamiento para las boletas distritales y les será más complejo dominar la birome: apuntarían a compartirla con los alcaldes y Kicillof en un esquema de tres tercios.

En la gobernación bonaerense visualizan la posibilidad de que la distinción de modos electorales separaría los tantos y podría redundarle el beneficio de que la gente pueda juzgar individualmente el gobierno provincial sin el influjo de la coyuntura nacional: “Puede representar la oportunidad de revalidar la gestión provincial”, admiten en el palacio de calle 6.

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