El dirigente de la Unión Cívica Radical de Almirante Brown Mario Helfenstein se refirió a la interna del partido centenario en la provincia de Buenos Aires, a lo que marcó que desde el sector de Adelante “se trabajó mucho para llegar a un acuerdo, a una lista única” que “en los distritos iba a facilitar mucho los acuerdos locales”. “Estamos en proceso de renovación de autoridad, lo cual para nosotros no tiene por qué ser traumático”, indicó.

"Obviamente hay matices, pero yo no veo diferencias de fondo en cuanto a lo que tiene que hacer el radicalismo de acá para adelante. Nuestra lista tiene una representación territorial muy amplia; la gran mayoría de los intendentes apoyan a Miguel Fernández. De los 30, 21 lo hacen. Mientras que la lista de Evolución tiene una fuerte presencia en la tercera sección, pero es bastante débil en cuanto a la representación territorial. Esa es una ventaja de nuestra lista", expresó el referente radical en contacto radial con Política del Sur.

Asimismo llamó a ponerse “de acuerdo después del 6 de octubre”. “Los radicales de la provincia de Buenos Aires debemos definir cuál es la mejor alternativa de cara al 2025. El gran desafío es cómo reconstruimos el radicalismo en un momento difícil para todas las fuerzas políticas tradicionales. Cómo nos posicionamos en este nuvo eescenario y cómo logramos que los bonaerenses nos vuelvan a tener confianza", aseguró.

Acerca de los diputados de la UCR que cambiaron su voto para dejar firme el veto a la movilidad jubilatoria, Helfenstein sostuvo que "estos cinco legisladores sacaron los pies del plato”. “Hubo una acción bastante rápida de los cuerpos orgánicos partidarios; la Convención Nacional les suspendió la afiliación ayer. Es importante aclarar que el bloque lo conforman 34, y solo cinco cambiaron su voto, cuando ya habíamos dejado clara nuestra postura de rechazar el veto", aclaró.

"Tenemos dificultades como las tiene el peronismo, que también tiene algunos gobernadores cuyos legisladores votan de manera contraria a la mayoría del bloque. Nosotros contamos con las herramientas institucionales para tratar de evitar este tipo de situaciones. Más allá de que la sanción está bien aplicada, hay un problema de fondo: al partido, a nivel nacional, le está faltando un espacio para coordinar y debatir. Está faltando un liderazgo nacional en el radicalismo para evitar este tipo de situaciones. Cuando no hay liderazgos, lo que tiene que haber es una conducción política que cumpla un rol importante en los cuerpos orgánicos", cerró.