

Leonela Barros, la activista por los derechos de los animales que denunció el caso del gato encontrado despellejado en el centro de Burzaco, pide testigos para encontrar al asesino. "Hay gente que compra esos videos", aseguró.
"Está relacionado con la pedofilia, la zoofilia, y el maltrato animal, filmarlos y venderlos en grupos de enfermos", manifestó, en diálogo con el programa radial Política del Sur, sobre el temor a que haya más víctimas, incluso humanas.
"Estamos buscando testigos. El fiscal se comprometió a buscar las cámaras", contó la joven sobre la causa, que tramita en manos de la UFI 3 de Almirante Brown.
Según pudieron saber por el informe veterinario, el asesino del gato despellejado cometió semejante hecho atroz "con un bisturí y sin anestesia".
El macabro hallazgo del animal fue descubierto el pasado 15 de agosto en la esquina de Tomás Espora y Adolfo Alsina, donde habría sido "revoleado" desde el interior de un auto negro que pasó por ahí.
"Presentaba signos de sufrimiento extremo, por lo que se decide la eutanasia, debido a que había perdido demasiada piel, y era imposible que el animal pudiera sobrevivir en esas condiciones", consta en el documento de la veterinaria.