Un joven de 18 años está detenido por balear en la cabeza a su padre, en un intento de parricidio ocurrido el 11 de agosto pasado en Ingeniero Budge, y por el cual también se encuentra tras las rejas un amigo suyo, considerado cómplice.

Mientras la víctima, un hombre de llamado Carlos Dos Santos, se encuentra internado en grave estado, familiares y amigos de los acusados piden su liberación a través de redes sociales, donde iniciaron una campaña para recolectar los fondos suficientes para contratar un abogado.

De acuerdo a lo manifestado en diferentes publicaciones que tuvieron decenas de comentarios que se solidarizaron con la causa para pedir la liberación de ambos, el hijo del sujeto baleado habría sido sufrido de reiterados maltratos y situaciones de violencia familiar atribuidas a su padre.

"Todos en el barrio sabemos el infierno que vivía Mauro en su casa. Tal vez se cegó después de una vida llena de maltratos", escribió una joven, en un extenso mensaje publicado días atrás, para pedir la excarcelación del principal acusado, que está privado de su libertad por "homicidio agravado por el vínculo en grado de tentativa".

En el caso de su amigo, este se encuentra imputado por "homicidio en grado de tentativa", un delito más leve. No obstante, también se encuentra tras las rejas y también piden que recupere la libertad.

El grave ataque ocurrió el 11 de agosto pasado, pero los presuntos agresores fueron detenidos el sábado último durante varios allanamientos realizados gracias a que fueron reconocidos por un video del hecho, filmado por una cámara de seguridad de la zona.

Fuentes policiales confiaron Política del Sur que del análisis de la secuencia de imágenes, como del aporte de testigos, determinaron que la víctima caminaba con dos individuos sobre la calle Rivadavia, hasta que uno de ellos sacó un arma de fuego y le disparó en la cabeza, sin mediar palabra.

Los efectivos del Comando de Patrullas de Lomas de Zamora llegaron al lugar y trasladaron en patrullero a la víctima hasta el Hospital Allende, donde ingresó como NN, debido a que no contaba con DNI, y tampoco nadie denunció su desaparición. Recién lo pudieron identificar con sus huellas dactilares.