La concejal de la Unión Cívica Radical (UCR) de Lanús, Ayelén Curlo, cuestionó al oficialismo local a poco de cumplirse el primer semestre de gobierno ya que evaluó que "es hora de que la gestión funcione". Al mismo tiempo, explicó que el partido centenario no será una oposición "porque sí", sino que acompañarán las medidas que beneficien a los vecinos. 

"Después de seis meses, ya va siendo hora de que la gestión funcione. Se percibe como si no hubieran arrancado del todo. Aclaro que desde nuestro bloque no vamos ni pretendemos ser una oposición que ponga palos en la rueda y vote todo en contra solo porque sí. Así como nos hemos opuesto a muchas cosas o proyectos que creemos que no ayudan a mejorar la calidad de vida de los vecinos, también hemos acompañado otros que nos han parecido positivos", recalcó la edil en contacto con Política del Sur. 

Por otra parte, pese a las diferencias que existen en el Concejo Deliberante con los representantes del PRO, Curlo reivindicó la gestión encabezada por Néstor Grindetti ya que recordó que desde la UCR "formaron parte". 

Asimismo, marcó distancia del partido que volvió a conducir Mauricio Macri. "Somos conscientes de las cosas que se hicieron mal, regular y bien. No creemos como el PRO que se hizo todo bien porque de lo contrario no hubiéramos perdido en la última elección. Creo que falta autocritica y creo que es fundamental si queremos algún día volver a ganar el Municipio", analizó.

Sobre la UCR y la Ley Bases

La derrota de Juntos por el Cambio en los comicios del 2023 desencadenó un reordenamiento en todos los espacios que integraron la coalición. La UCR no es la excepción y según Curlo el partido se encuentra "trabajando en una alternativa" para "representar y ampliar" al radicalismo. 

"Desde la UCR de Lanús estamos articulando trabajo con Facundo Manes en el Congreso Nacional y con la diputada Nazarena Mesías y el bloque ‘Acuerdo Cívico (UCR-GEN)’ en la Legislatura Bonaerense", señaló. 

Para culminar, se refirió al tratamiento de la Ley Bases en la Cámara alta, una de las circunstancias que evidenció las diferentes miradas dentro de la UCR. "Si bien es verdad que la ley que entró al Congreso no es la misma de la primera vez y se han logrado cambios, creo que es deber del radicalismo, sabiendo cuál es su responsabilidad y cuáles son sus banderas, votar en contra de artículos como las facultades delegadas, el RIGI o la propuesta moratoria", subrayó.

"Las modificaciones hechas nos resultan insuficientes y siguen dejando afuera a personas que están en situación de vulnerabilidad. Es nuestro deber proteger a esos sectores", culminó.