Una joven de 23 años denunció a las enfermeras del Hospital Arturo Oñativia de Rafael Calzada por la muerte de su bebé recién nacido, debido a que, según aseguró a la justicia, "no recibió las atenciones correspondientes", lo que habría provocado graves consecuencias en la salud de la criatura.

De acuerdo a lo relatado en la denuncia, a la que accedió Política del Sur, la madre, que cursaba un embarazo de 9 meses, se dirigió al centro de salud el 13 de febrero, a punto de parir a su hijo. Sin embargo, el trato del personal que la atendió no fue el que ella esperaba, a pesar de los fuertes dolores abdominales que presentaba al momento de su ingreso.

"Yo no daba más del dolor, pero solo me aplicaron una buscapina", expresó a este medio la chica llamada Antonella. La enfermera que la asistió, le realizó el primer tacto y le manifestó que todavía se encontraba en trabajo de parto, por lo que tenía que volver a su domicilio.

Siempre según la acusación, la víctima regresó al nosocomio, a raíz de los fuertes dolores. "Otra vez ustedes, ¿no ves que todavía te falta?" le reprochó otra enfermera, mientras las otras profesionales se reían de ella, que lloraba desesperada, hasta que notaron que había roto bolsa.

"Estuve una hora pidiendo por favor. Cuando pensé que ya había terminado todo, todavía me esperaba lo peor", sostuvo la denunciante en diálogo con PDS. Lo último que recuerda en el corto momento en que tuvo a su hijo en sus brazos: le dijeron que el bebé nació con complicaciones, y que le tuvieron que hacer trabajos de reanimación y colocarle un respirador artificial.

El cuado de salud de la criatura requirió la atención en un sitio de mayor complejidad, por lo que fue derivado al Hospital Evita de Lanús, donde falleció el 15 de febrero pasado. "En el Evita de Lanús, la atención fue brillante, pero no pudieron hacer nada. Falleció de una encefalopatía neonatal", agregó la madre del bebé fallecido.