El clima estaba caliente. Y no precisamente por los valores que arrojaba el termómetro en una tarde agobiante. En el estadio Néstor Díaz Pérez se registraron temperaturas elevadas porque el equipo venía de sufrir dos derrotas consecutivas, porque no había podido convertir en esos dos encuentros y, principalmente, porque el duelo ante Platense se presentaba como un choque muy importante por la permanencia. Ambos equipos están cerca de la zona roja. Y el Granate se desahogó con una victoria clave para respirar. Un triunfo que fue desahogo, que insufló oxígeno en los pulmones de los jugadores e hinchas del equipo local. De los murmullos, de algunos silbidos que se escucharon durante algunos tramos del encuentro en los que el trámite se complicó para los dirigidos por Ricardo Zielinski, se pasó sin escalas a un aplauso cerrado y unánime.

Lanús no brilló. Incluso hubo pasajes en los que sufrió. El Granate lo ganó porque fue contuntente. Platense, que tuvo un 611% de posesión de pelota, generó situaciones claras, pero no las aprovechó y pagó cara su falta de eficacia. La diferencia radicó en la capacidad y la jerarquía que tuvo el dueño de casa para definir. Los de Zielinski pegaron en los momentos justos. Y así, con golpes certeros, demolieron a su adversario.

Chatísimo primer tiempo en la cancha del Granate. Interrupciones por doquier que incluyeron una revisión en el VAR de un penal inexistente para la visita cobrado por Sebastián Zunino, lesionados, protestas, cinco amonestaciones y varias infracciones. Raúl Lozano se marchó con un golpe en su rodilla derecha, pero su reemplazante, Ciro Rius, debió salir a los 15 minutos por una molestia.

Aún así, en este poco tiempo neto de juego, los de Ricardo Zielinski fueron más. Se adelantaron en el resultado rápidamente con el tanto del ex River ayudado por el desvío en Ignacio Vázquez. Luego, Juan Pablo Cozzani apareció en escena para sostener el 1-0 en contra.

El complemento fue diferente. El Calamar salió con la marcada intención de llevarse puesto a su oponente, especialmente con las subidas por izquierda de Sasha Marcich como especie de lateral-volante.

Inclusive, tras una proyección suya por aquel sector, Vázquez tuvo la oportunidad más clara del Marrón cuando conectó el centro del zurdo y reventó el travesaño del arco de Lucas Acosta.

Lanús se abroquelaba cada vez más atrás, por lo que el público empezaba a impacientarse. Así lo demostraba con algunas decisiones del Loco, su capitán. Tras sus errores, se multiplicaban los murmullos en La Fortaleza.

Sin embargo, el ex Atlético Tucumán y Estudiantes apareció en el momento justo: sacó un golazo de la galera, bajó la persiana del partido con el 2-0, pidió aliento y evocó el Topo Gigio de Juan Román Riquelme, dedicado a un hincha que lo cruzó al término del primer tiempo.

Revisión del VAR mediante, Díaz confirmó la goleada por 3-0 con un doblete. Asistido por Ezequiel Muñoz, solo tuvo que empujarla, pero aprovechó para revertir abucheos por aplausos. Minutos después, se fue ovacionado cuando lo reemplazó Jonathan Torres.

Los del Ruso volvieron a la victoria tras dos derrotas consecutivas y ahora suma seis puntos, como Boca, en la Zona B de la Copa de la Liga. Este miércoles, desde las 17, visitará a Sarmiento en Junín por la fecha 5.

VAMOS LANÚS CARAJO 🇱🇻 Lanús 3-0 Platense

⚽ Felipe Peña Biafore, Leandro Díaz x2

🏆 #CopaDeLaLiga 2024
📌 4ª fecha
🔜 Sarmiento#JuegaLanús https://t.co/f4CzzCCunU pic.twitter.com/PlINdNQiCj

— Club Lanús (@clublanus) February 12, 2024