Por: Federico Cedarri

El gobernador bonaerense Axel Kicillof mira de reojo la reconfiguración de las tribus legislativas con vistas al comienzo del período ordinario que se habilitará a partir del 1 de marzo próximo.

El mandatario bonaerense necesita con celeridad la aprobación de al menos unas decenas de pliegos para cristalizar coberturas en el ámbito del Poder Judicial bonaerense.

Desde la oposición parlamentaria del PRO esgrimen a PDS que el estancamiento en las negociaciones es producto de que Kicillof no consensuó algunos nombres y esa cuestión sería el disparador de la demora en la prestación de acuerdos.

Vale mencionar que la Comisión de Asuntos Constitucionales del Senado es el ámbito donde se cocina la aprobación de los expedientes enviados por el gobierno para luego desembocar en el recinto.

La Comisión de ACA es encabezada por el senador camporista Emanuel González Santalla pero debe configurarse una nueva composición a partir del recambio legislativo, aunque se descuenta que el peronismo por ser oficialismo continuará  al frente del estratégico ente.

Otra de las cuestiones que el Gobernador pondría en agenda para que se comience a analizar durante el primer semestre del 2024 en la Cámara Alta tiene que ver con complementar la integración de la Suprema Corte de Justicia provincial.

En el máximo tribunal bonaerense se necesita de manera perentoria cubrir tres sillas y aquí es donde el Gobernador mira con entusiasmo la división de los ex socios de Justos por el Cambio, lo tienta la posibilidad de negociar independientemente con el radicalismo el consenso de un paquete de nombres que eventualmente confluya en dos candidatos provenientes del peronismo y otro aspirante con ligazón centenaria.

Cabe recordar que el último nombramiento en el máximo tribunal fue el de Sergio Torres apalancado por la ex gobernadora María Eugenia Vidal: “Ya le tocó al PRO, ahora el próximo nombramiento que le corresponda a la minoría es para nosotros” desliza una fuente radical legislativa a PDS.

Kicillof mira con particular interés la situación de dispersión opositora en el Senado bonaerense ya que allí tiene la llave no solo para los nombramientos de vacantes en la justicia sino también para la conformación  del directorio del Banco Provincia.

El Gobernador confía en profundizar los lazos que hoy ostenta con la liga de intendentes radicales que comanda el rauchense Maximiliano Suescún que tiene notable injerencia sobre los legisladores provinciales.

En ese esquema, es que podría darse una convergencia que aspiraría a un acuerdo táctico al sumar el voto de los 21 legisladores peronistas de la Cámara Alta  con los 9 miembros del bloque radical- Cambio Federal para acercarse a los dos tercios y desairar al PRO.

Kicillof también podría contar con el favor de algunos votos libertarios como los del bloque del disidente Carlos Kikuchi que encabeza un bloque de tres miembros que no reportan a la Casa Rosada.

Este grupo rebelde mileísta apoyó el endeudamiento solicitado por el Gobernador del orden de los 1800 millones de dólares y la Ley Fiscal que contenía aumentos promedios del 200% en los tributos provinciales.

La disgregación opositora no deja de ser una buena noticia para Axel Kicillof sobre todo en un año en el que asoman inconvenientes económicos y el Gobernador tendrá que apelar al Parlamento para obtener herramientas que le permitan surfear con éxito la crisis de financiamiento.

Reformas electorales en el horizonte

Es un hecho que la oposición legislativa bonaerense insistirá para que se avance en modificaciones electorales y constitucionales en la provincia de Buenos Aires.

Kicillof se mostró condescendiente con la posibilidad de avanzar en la unicameralidad legislativa que deberá ser precedida de una reforma parcial de la Constitución provincial, pero no tendría intenciones de ceder en lo que tiene que ver con la instauración de la boleta única.

El peronismo se negaría a avanzar en una reforma integral que puede comprometer su base de sustentación electoral en el ámbito de la provincia de Buenos Aires, su principal bastión.

Sera objeto de un debate que la oposición no cejará en su intento de dar dentro del Parlamento provincial,  ya que si logra articular fuerzas con la totalidad de los bloques libertarios y la izquierda podría conseguir una mayoría para avanzar en ese sentido.

De todos modos son especulaciones que no se vislumbran como posible en el corto y mediano plazo y que quizás puedan comenzar a cobrar notoriedad en el 2025 cuando lo electoral vuelva a teñir sin tapujos el escenario político.

El mandatario también pugnará por el rápido tratamiento en comisiones en la Cámara de Diputados de dos iniciativas que presentó sobre el filo del cierre del 2023: la creación de una empresa de emergencias médicas provincial para complementar el traslado de pacientes con el SAME y la consolidación de la producción bonaerense de medicamentos y otros insumos sanitarios para abaratar costos en los centros de salud.