

En el Concejo Deliberante de Esteban Echeverría aprobó gracias a la mayoría con la que cuenta el FdT la Rendición de Cuentas del ejercicio 2022 envíado por el Departamente Ejecutivo. El montó final fue de 25.315 millones, casí el triple de lo que se había proyectado en el Presupuesto para ese año: 9.748 millones.
La aceptación contó con 14 voluntades, mientras que el rechazó cosechó 6 adhesiones.
Para defender el gasto durante el año pasado, el presidente del bloque de concejales del Frente de Todos, Angel Cammilleri, remarcó que “los salarios representan alrededor del 34% del Presupuesto e impacta de forma significativa en el presupuesto municipal”.
Sostuvo que “bastante seguido llegan modificaciones salariales, esto hace que se resienta la carga presupuestaria y que esto signifique cambiar partidas”.
“La deuda flotante se mantiene en niveles sostenibles sin afectar el funcionamiento del municipio. Alrededor del 62% de la inversión fue financiada por recursos de libre disponibilidad, que el Municipio recibe en pagos de tasas y otras cobranzas. Y solo 2,65% son recursos afectados”, justificó el edil.
Cammilieri recordó que la Comuna se hace cargo de los costos de “reparación de vehículos de seguridad, de combustible, el mantenimiento de las patrullas y el seguro”. Y precisó que en el área de Salud, el Hospital Santamarina se sostiene con 17% de recursos de disponibilidad, mientras que toda la secretaría usa el 24%.
También sostuvo que el servicio de recolección de residuos ocupó el 10% de recursos de libre disponibilidad. Remarcó que se realizaron ampliaciones y remodelaciones en centros de salud, la construcción de 200 cuadras y obras en el Hogar Escuela Evita.
Desde el lado de la oposición, el titular de la bancada, Luciano Gómez Alvariño, reclamó que “el Departamento Ejecutivo debe tener a libre disponibilidad de los concejales la documentación y entregar la clave de acceso al RAFAM”, aunque reveló que este año tampoco pudieron acceder.
“No podemos analizar si no tenemos acceso a la información recaudatoria. Vemos una enorme diferencia, muy por encima del promedio de cualquier municipio, entre el presupuesto aprobado y el ejecutado”, planteó
En ese sentido comentó que “si bien el Ejecutivo tiene la facultad de reasignar partidas, no se puede efectuar un gasto que no tenga presupuesto suficiente” y apuntó que en algunas áreas hubo “diferencias negativas”.
Pidió por la implementación de “un boletín oficial donde debería publicarse todos los decretos”, ya que “sería una herramienta fundamental en el marco de la transparencia y la apertura hacia los vecinos”.
Entretanto, aseveró que “el Tribunal de Faltas señala falencias en los procesos licitatorios” y que “desde el 2014 hasta ahora hay 855 millones de pesos que no están justificados”.
Gómez Alvariño apuntó que el programa de acciones comunicacionales tuvo una suba de 108%, alcanzando 481 millones de pesos, y el sector de publicidad y propaganda hubo un aumento de 235%. Reclamó que “en programas prioritarios hubo recortes significativos”.
“No solo no se llega a ejecutar la partida que aprobamos, se le resta recursos al programa de formación y apoyo al empleo en un 54%, al de asistencia social en un 30%, asistencia alimentaria en un 33% y atención primaria a la salud en un 17%. Hay un grosero error en la concepción del gasto”, sentenció.
Por último, informó que la deuda flotante fue de 2.306 millones de pesos. “Algo está fallando, si tuvimos un crecimiento del Presupuesto, por eso no están dadas las condiciones para aprobar esta rendición”, cerró.