El índice de inflación que mide la Universidad Metropolitana para la Educación y el Trabajo (UMET) se ubicó en el 6,3 por ciento en febrero y encendió las alertas entre los sindicatos que por estos días negocian aumentos salariales. La “inflación de los trabajadores”, como se denomina al índice de la UMET, ya acumula un alza del 12,2 por ciento en el primer bimestre del año, en sintonía con los cálculos que vienen realizando las distintas consultoras privadas.

La tasa genera un adelante preocupante pensando en los datos del INDEC que se darán esta semana, y se estima que en el mes pasado la suba estará por encima de lo previsto por el Ministerio de Trabajo, por segundo mes consecutivo. Según el relevamiento, la evolución de los precios minoristas, se aceleró 0,8 puntos porcentuales respecto a los registros de enero.

El dato más relevante es que la inflación interanual perforó los tres dígitos por primera vez desde la salida de las hiperinflaciones de 1989 y 1990, y se ubicó en el 101,8 por ciento. A su vez, en el primer bimestre del año los precios acumularon un alza del 12,1 por ciento. Esta suba, de mantenerse a lo largo de 2023, sería compatible con una inflación acumulada del 98,9 por ciento.

La inflación de febrero estuvo motorizada por Educación (16 por ciento), algo que coincide con el reinicio del año escolar. Y le siguieron los rubros de Salud (6,9 por ciento) y Alimentos y Bebidas (6,5 por ciento). Este último rubro, de alta incidencia en el nivel general, estuvo particularmente impulsado por frutas, infusiones y carnes, las que empezaron a subir por encima del nivel general tras más de un semestre de relativa moderación de precios.

Esta semana se publicará el índice de precios al consumidor (#IPC) de febrero de 2023, entre otros informes técnicos. pic.twitter.com/nznCOiWSsN

— INDEC Argentina (@INDECArgentina) March 13, 2023

El índice oficial sobre la inflación de febrero va a ser difundido por el INDEC el 14 de marzo. Los analistas que aportan sus pronósticos al Relevamiento de Expectativas del Mercado (REM) del Banco Central, estimaron que el alza será del 6 por ciento. Esto es 0,6 puntos superior al valor pronosticado en la encuesta previa. Por su parte, según destacó la UMET en su último informe sobre inflación, el empleo formal en el sector privado continúa creciendo (lleva 29 meses seguidos al alza, algo que no se daba desde el 2009), aunque con cierta desaceleración dado que el nivel de actividad se redujo en la última parte del año. Esto coincidió con los mayores controles a las importaciones -que limitan la producción industrial- y las dificultades cambiarias.

El desempeño del empleo viene siendo particularmente dinámico, con un alza interanual del 4,4 por ciento. Comparado con fines de 2019, hay 272 mil empleos asalariados privados registrados más, aunque todavía faltan recuperar 4 mil empleos respecto al pico de abril de 2018. El informe analiza también lo que viene ocurriendo con el empleo independiente, segmento especialmente dinámico en los últimos años, de la mano del monotributo y, particularmente, del monotributo social.

El salario real, por su parte, registró una considerable mejora en diciembre, producto de la implementación de la asignación no remunerativa establecida por el gobierno y de que la mayoría de las paritarias terminaron teniendo aumentos salariales similares a la inflación de 2022. Comparado con diciembre de 2019, el salario real mediano en el sector privado registrado subió 3,5 por ciento y se ubicó en los niveles más altos desde marzo de 2020. “No obstante, la aceleración inflacionaria de los últimos meses pone un interrogante respecto a la sostenibilidad de la recuperación del último tramo de 2022. A su vez, comparando contra principios de 2018, el salario real mediano se ubica casi 12 por ciento por abajo”, señaló el trabajo de la UMET.