Por: Federico Cedarri

El sector justicialista disidente que no tiene ataduras con el universo kirchnerista trabaja denodadamente para contribuir a la generación de condiciones que permitan la consolidación de una tercera vía electoral.

Entiende que el espectro político está contaminado por la grieta que emerge de las coaliciones mayoritarias y que se hace imperioso la construcción de una alternativa que contenga el hastío que reflejan las encuestas hacia las principales referencias electorales, y que hoy está siendo explotado por el libertario Javier Milei.

Quien que se puso al hombro el armado de esta opción es el gobernador de Córdoba, el mediterráneo Juan Schairetti, que ha logrado arrimar a la conversación a un par de gobernadores peronistas como es el caso del puntano Alberto Rodríguez Saá, que no va a ir por la reelección en su pago chico, y que ve con buenos ojos la corporización de un espacio dentro del peronismo que comience a prohijar el poskirchnerismo.

Schiaretti también conferenció con el sanjuanino Sergio Uñac y con el santafesino Omar Perotti que si bien le prestaron el oído al córdobés no comprometieron su apoyo a la aventura del mediterráneo, sin embargo coincidieron en el diagnóstico de que el peronismo debe comenzar un periodo de unificación luego del 2023 cuando suponen que la influencia de Cristina Kirchner solo quedaría reducida a la provincia de Buenos Aires.

El otro referente de este espacio es el ex gobernador de Salta, Juan Manuel Urtubey, que tiene a cargo las negociaciones en la provincia de Buenos Aires con aquellos referentes que representaron al lavagnismo en 2019 cuando el salteño acompañó en el binomio presidencial al economista.

Este grupo de peronistas no kirchneristas también sondearon la posibilidad de incorporar en sus filas al ministro del Interior kirchnerista, Florencio Randazzo, que por ahora no parece apurado en tomar una decisión al respecto.

El Flaco viene de una experiencia poco feliz con su candidatura a diputado nacional por la provincia de Buenos Aires en las legislativas del 2021 donde quedó afuera de la elección general por el escaso caudal de votos que recolectó.

Randazzo invirtió muchos recursos en logística y el resultado electoral lo golpeó con fuerza lo que refuerza la incertidumbre sobre su futuro político.

Duhalde opera en la provincia de Buenos Aires

El gobernador de Córdoba Juan Schiaretti participó de un cónclave con el ex presidente, Eduardo Duhalde, donde el bonaerense habría puesto a disposición los resabios de su otrora tropa política.

El dos veces gobernador se muestra convencido de que la jefatura de Máximo Kirchner al frente del PJ bonaerense se encuentra en una etapa de deterioro que más temprano que tarde perimirá cuando los intendentes peronistas le suelten la mano.

El objetivo de Duhalde en este tiempo político pasa por sostener encuentros subterráneos con distintos alcaldes y referentes, incluidos algunos que hoy están enrolados dentro del estructura del PJ bonaerense, para ir tendiendo redes que posibiliten a mediano plazo una reestructuración de la conducción partidaria en la provincia.

Duhalde avizora un panorama similar al del 2001, donde se necesitó de tejer una concertación entre los diferentes sectores políticos de manera transversal para paliar la crisis ocasionada por el deterioro del régimen de convertibilidad.

Es por esta cuestión, que en una especie de remake de aquellos días aciagos el ex presidente tiende una mano a los sectores del radicalismo bonaerense y los insta a trascender el escenario de grieta y apurar la construcción de un frente heterogéneo que reivindique los objetivos de producción y trabajo.

Es factible que la diputada nacional Graciela Camaño, ex ministra de Trabajo del Cabezón, comience a orbitar en ese armado y  algunos la instan a que sea la candidata a gobernadora del espacio.

A la Negra no le disgustaría aquella posibilidad, ya que no solo sumaría de parte del peronismo residual sino que además podría articular acuerdos con el socialismo.

Más allá de esta particular situación que se maneja en el laboratorio del peronismo disidente, también se están evaluando distintos nombres que puedan encaramarse como opciones para el territorio bonaerense.

Se ha deslizado que sectores cercanos al ex presidente se habrían involucrado en sondeos preliminares con un ex ministro de Alberto Fernández a fin de convencerlo para postularse en el ámbito de la provincia de Buenos Aires.