Este miércoles delegados y choferes de la Empresa San Vicente realizaron un paro sorpresivo luego de que, en las últimas horas, un conductor de la línea 177 sufriera un brutal ataque en Claypole. Las líneas afectadas fueron 263, 435, 177, 79, 51, 74, 370, 388, 503 y 403.

El chofer fue agredido el martes por diez hombres que se habían negado a pagar el pasaje. Sucedió en la localidad de Claypole, en la calle Figueroa y Luis Viale. Tras la fuerte golpiza, el conductor fue hospitalizado en el hospital Oñativia de Rafael Calzada.

Tras anunciar la medida de fuerza, choferes y delegados de la línea 51 se congregaron en las inmediaciones de la empresa, ubicada sobre la avenida Espora de Burzaco para impedir la salida de vehículos. Luego de que se confirmara que el conductor se encuentra fuera de peligro, decidieron levantar el paro y reanudar el servicio.

Colectivero baleado en Monte Grande

El 6 de octubre, colectiveros habían realizado una medida de fuerza similar tras un hecho ocurrido en Monte Grande.

Un chofer de la línea 501 había sido baleado en el Barrio La Victoria por un delincuente que le disparó en la mano luego de un forcejeo para robarle las zapatillas. Tras este hecho, conductores de la empresa realizaron un paro que se extendió por 24 horas