Por: Diego Lanese

Ante la inminente convocatoria a discutir la paritaria de este año, diversos sectores de los estatales nacionales alertaron que antes de lograr una suba de salarios deben recuperar lo perdido hasta este momento producto de la inflación, para lo cual reclaman un “aumento de emergencia”.

En base a datos proporcionados por la Junta Interna del INDEC, que cada mes realiza un estimativo de la caída del salario real de los empleados públicos y calcula una canasta básica de alimentos y servicios, diversos espacios se movilizan para lograr este incremento, que permita recuperar el poder adquisitivo.

Los números que manejan algunas comisiones internas y delegados de ATE aseguran que se necesitan un salario de más de 154 mil pesos para que una familia tipo afronte los gastos necesarios, lo que está lejos del salario promedio de los empleados del Estado nacional.

Luego de conocerse el último cálculo de pérdida salarial realizado por los trabajadores del INDEC, los estatales comenzaron una nueva campaña para que se pague un incremento de emergencia antes de discutir la paritaria de este año, que comienza a regir el 1° de junio.

Delegados y juntas internas piden “un aumento de emergencia del 60 por ciento para empezar a recomponer nuestro salario; urgente convocatoria a la mesa de negociación; paritarias 2022/23 sin techo y con cláusula gatillo, y pase a planta permanente con estabilidad laboral inmediata sin pérdida salarial para todos los trabajadores”. Además, los trabajadores del organismo de estadísticas piden el pago inmediato de las horas censales.

“La conducción de ATE abandonó el reclamo de recuperar lo perdido durante la macrismo”, le dijo a Política del Sur un dirigente estatal que no está alineado a la conducción del gremio. El mismo recordó que incluso ese pago “fue una promesa de Alberto Fernández en campaña, con la reincorporación de los 35 mil despedidos. Ninguna de las dos se cumplió”.

El número del 60 por ciento sale del último reporte mensual del INDEC, que calculó la pérdida salarial desde el 2015 a esta fecha. “La pérdida del poder adquisitivo de nuestro salario, tomando como base a nuestro caso testigo el nivel D Grado 0 del SINEP, desde diciembre del 2015 a abril de este año, es de un 40,3 por ciento por lo que se hace forzoso que nuestros paritarios soliciten, en la próxima convocatoria a la discusión de la pauta salarial, un aumento de emergencia, pagado en una sola cuota, de un 60 por ciento para poder alcanzar el nivel de compra que evidencia nuestro ejercicio”, expresó el trabajo.

Además, los trabajadores del INDEC situaron el nivel de la canasta necesaria para afrontar los gastos en alimentos y servicios de una familia tipo. En ese punto, determinaron que “un hogar constituido por una pareja de 35 años con dos hijos en edad escolar necesitó, en abril de 2022, de 154.134 pesos para satisfacer sus necesidades”.

“Este valor, aclaró el trabajo al que tuvo acceso Política del Sur, “se compone de 53.029 pesos necesarios para adquirir una Canasta Alimentaria Mínima y de 101.105 pesos para acceder a otros bienes y servicios básicos”. “Es necesaria una política que evite que la carestía de los alimentos genere más hambre. Sin recomposición salarial y trabajo genuino de calidad no hay reactivación posible”, analizó el informe de la junta interna del INDEC.

En cuanto a la paritaria sectorial, se espera que el gobierno realice una convocatoria formal en estos días, ya que la paritaria 2021 vence el 31 de mayo. Los sindicatos estatales vienen de conseguir un refuerzo en la paritaria 2021 del 10 por ciento, totalizando un aumento de poco más del 64 por ciento para dicho período. Ahora, según se pudo saber, las partes “están cerca” de cerrar un aumento del 60 por ciento para el período que va de junio de 2022 al 31 de mayo de 2023.

Para estos grupos de delegados de ATE, “además de exigir en la próxima paritaria estatal un aumento de emergencia para todos los trabajadores del 60 por ciento por ciento también es necesario acordar revisiones en periodos más cortos y cláusula de actualización automática o cláusula gatillo”.