Este sábado se llevó a cabo la marcha mundial de la marihuana, a lo que el voluntario de la ONG Mama Cultiva, Matías Anchetta, comentó que además de movilizarse, varias agrupaciones asociadas a la temática canábica festejaron “la aprobación del marco regulatorio para el cultivo de cannabis medicinal y el cáñamo industrial”, que se dio en la última sesión del Congreso.

“Nosotros sabemos lo que construimos hasta acá y lo que nos falta, que es liberar la planta. Podemos autocultivar, pero todavía hay muchos presos por plantar y hay muchos proyectos provinciales que tienen muchas hectáreas cultivadas, entonces ahí hay muchos problemas de derechos”, recalcó Anchetta en contacto con Política del Sur.

En esa línea destacó que, gracias al Reprocann, hay un permiso para cultivar y recordó que “antes no se podían ni comprar semillas”. “Vamos avanzando de a poquito, por eso buscamos despenalizar la planta, que va a ser la próxima lucha”, aventuró.

Además afirmó que “hay cerca de 40 mil inscriptos” en en el registro para autocultivo de uso propio. También indicó que "hay muchísima gente que necesita la planta y no todos se animan a plantar”.

“La industria está hace 15 o 20 años. Hay mucho conocimiento en quienes plantan. Ahora estamos en una oportunidad histórica en Argentina, se están haciendo bien las cosas. La necesidad de cannabis hay, tenemos que ser protagonistas en esta materia", contó el activista.

📌 #Sociedad [AHORA🔴] 🗣️🎙️ Al aire Matías Anchetta, voluntario de @MamaCultivaArg.

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— Política del Sur (@PoliticaDelSur1) May 9, 2022

Asimismo explicó que en el país "se están tomando ejemplos de otros países que tienen la regulación más avanzadas, se ve lo que sirve para Argentina y qué no, con eso se va armando. El objetivo de Uruguay fue combatir el narcotráfico, acá estamos hablando de salud".

"Yo como epiléptico tenía que tomar mucha medicación. Muchos dicen que la marihuana es la puerta de entrada a otras drogas, para mí fue la puerta de salida de esas otras drogas", reflexionó.