El dirigente sindical Hernán Rossi, ex secretario de Interior de la UPCN Seccional provincia de Buenos Aires, denunció que fue víctima de un atentado en la madrugada del 12 de enero, cuando sufrió el incendio del frente de su casa.

Según contó a Política del Sur, ese día, alrededor de la 1:40, un hombre montado en una moto se subió a la vereda y roció combustible en el frente de su casa.

“Mi hija escucha una moto, se asoma a la ventana y ve que se sube a la vereda. Luego observa como esta persona tira un líquido, que lo va a determinar la pericia que hizo la fiscalía que está interviniendo, para el frente y para adentro a través de las hendijas, prende fuego y se va a toda velocidad. Mi hija grita y cuando llegamos abajo se estaban prendiendo las cortinas y las persianas del lado de afuera. A los minutos llegó el 911, se quedaron un rato para la seguridad y tranquilidad de la familia”, relató Rossi.

Y luego agregó: “La realidad es que si mi hija no estaba despierta hoy estaríamos todos muertos”.

Precisó que radicó la denuncia en la UFI 3 de La Plata y aseveró que “hay tintes mafiosos” en lo ocurrido. “Este es el segundo hecho. Antes había sido una carta con el nombre de mis hijos”, recordó

Su participación en UPCN y su repentina salida

Rossi, en este marco, se refirió a su salida del gremio y el conflicto que se originó. “Era secretario de Interior de la provincia de Buenos Aires y se me comunicó desde la conducción que no iban a contar más con mi representación dentro de la organización, no habiendo de por medio ninguna discusión ni situación que así lo ameritará”, afirmó.

“Me lo informó el secretario general que no pertenecía más a la organización por lo cual mandé carta documento solicitando que se me indique cuál es la situación y ante la respuesta que recibí, cuando abran los tribunales vamos a ir a la justicia laboral porque yo creo que con la decisión que se ha tomado, se me ha coartado la libertad sindical”, advirtió.

Y agregó: “Hoy me sigo preguntando qué pasó y no sé qué intereses puedo haber molestado, pregunté las razones y son irrisorias. Hasta me dan vergüenza repetirlas”.

Valoró, asimismo, que recibió la “adhesión y solidaridad de un montón de compañeros”. “Si las agresiones continúan no sé cuánto podemos aguantar seguir en la casa, la intención no es cambiar mi forma de vida ni la de mis hijos”, remarcó.

Sentenció que “la Justicia va a tener que determinar quiénes son los culpables de estos ataques”. “Lo que te puedo decir es que en 48 años de vida nunca tuve problemas con nadie”, concluyó.