A más de dos semanas de la vuelta a la presencialidad plena en los colegios, la licenciada en Psicopedagogía Analía Lasmaries indicó que en los establecimientos educativos los equipos de orientación están “tratando de trabajar la revinculación de los chicos después de la pandemia porque ocurrieron problemas familiares en torno a esto”.

“La escuela no es solo es un espacio de educación pedagógica sino que también es de contención en diferentes niveles. Muchos chicos se desvincularon por falta de conectividad o problemas familiares”, expresó la trabajadora escolar en Política del Sur.

En ese sentido remarcó que en este régimen presencial se está poniendo énfasis “para que los alumnos vuelvan a tener una rutina escolar que no tienen hace un año y medio”. Asimismo aseguró que “de un curso de 30 estudiantes, puede que 15 se hayan desvinculado, algunos totalmente y otros de forma parcial”.

Lasmaries afirmó que los principales consecuencias del aislamiento pasaron por “no tener internet y la falta de apoyo familiar para guiar esta vinculación”. “Esa falta de contención hace que los chicos no sepan como manejarse”, evaluó.

En cuanto a las tareas de los equipos de orientación escolar aseveró que durante “la virtualidad plena fue bastante complicada”. “Al no tener cómo comunicarnos en algunos casos estábamos perdidos”, recordó.

“Ahora se están empezando a ver las secuelas de este año y medio de desvinculación. En lo académico, las escuelas están trabajando para que no repitan. Hay que respetar los tiempos que necesitan los chicos para adaptarse a la normalidad”, comentó.

Otras complicaciones que la psicopedagoga marcó fue “la dificultad de algunos alumnos para vincularse con el otro”. “Después de tanto encerrarse, algunos chicos están con muchos miedos y con dificultades para comunicarse y expresarse. Acompañarlos desde los psicológico es fundamental”, cerró.