La Primera C viene siendo complicada para Claypole. El elenco de Roque Drago no se pudo adaptar a la categoría y no ha tenido los resultados esperados. Por eso, buscará la primera victoria del campeonato cuando visite a General Lamadrid con el arbitraje de Felipe Viola.

Claypole llega al encuentro en la última posición con apenas dos puntos, producto de dos empates y tres derrotas en los cinco partidos jugados hasta el momento. El tambero está anteúltimo en la general con apenas 19 puntos sobre 24 partidos jugados.

Y ahí está el dato que marca la mala campaña de Claypole en su regreso a la Primera C. De esos 24 partidos, los dirigidos por Roque Drago ganaron apenas dos (uno en el clásico ante San Martín de Burzaco) y la racha negativa es muy larga: hace nueve partidos que no gana con cuatro derrotas y cinco empates.

General Lamadrid, por su parte, marcha 7° con 9 puntos, a cinco del líder Ituzaingó. En la general, el carcelero está 12° con 29 puntos, a 9 puntos de la zona de reducido, producto de su gran sprint final en el torneo apertura. Sin embargo, hace cuatro partidos que no gana con tres empates y una derrota. 

De local el carcelero viene bien: hace tres partidos que no pierde. La última vez que se enfrentaron fue en la casa de Claypole, en un partido que terminó empatado 1-1.

El armado del equipo

Para este encuentro tan importante, Roque Drago no podrá contar con dos figuras muy importantes: Juan Cruz Iglesias y Hernán González. Los dos mediocampistas llegaron a la quinta amarilla y no podrán ser parte del once inicial. En sus lugares ingresarían Benjamín Giménez y Hernán Paz.

En definitiva, el once de Claypole sería: Tiago Libares; Sebastián Amaya, Cristian Ordoñez, Emanuel Díaz, Alejo Daivez; Damián Pérez Roa, Hernán Paz, Joshua Romero, Sergio Acosta; Benjamín Giménez y Thiago Calone.

Por su parte, el probable de Lamadrid sería: Néstor Acosta; Nahuel Tribulo, Nicolás De Vito, Alejandro Álvarez, Leandro Coronel; Ricardo Priori, Martín Sarandeses o Santiago Yossini, Nicolás Velazco, Nazareno Hvala; Gregoria Abregú y Tomás Pavone.