En una sesión especial del Concejo Deliberante de Esteban Echeverría, el cuerpo aprobó por mayoría la rendición de cuentas del año 2020 de la gestión del intendente Fernando Gray. Desde el oficialismo se destacó que hubo un superávit de más de 300 millones de pesos, mientras que la oposición reclamó cambios discrecionales en las partidas presupuestarias.

En una debatida jornada virtual de casi dos horas, el edil del PRO Luciano Gomez Alvariño tomó la palabra para adelantar que desde su bloque no se le daría el visto bueno al ejercicio del año pasado y que pedirían “un análisis exhaustivo del tribunal de cuentas”.

“Notamos que el ejecutivo demuestra una significativa insolvencia en la estimación presupuestaria. Se dice que van a ingresar un monto pero después vemos que es otro. La reasignación discrecional de las partidas convierten a cada presupuesto en una ficción”, expresó.

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En ese sentido que marcó que “se presupuestaron 4600 millones de pesos y se gastaron 6500 millones”, “se recaudaron tasas municipales con un aumento de más del 20%” de lo que se había aprobado.

Además indicó que el Ejecutivo debe “notificar al HCD cada vez que hace un cambio presupuestario, porque modifica la voluntad de los concejales”. Y que “la ley orgánica municipal prohíbe realizar gastos que no estén en el presupuesto o excedan el monto de las partidas autorizadas”.

Resaltó también que “entre 2010 y 2019 el intendente modificó por decreto partidas por un total de 13752 millones que nunca fueron comunicados” y que en el 2020 en “Servicios comerciales y financieros en acciones comunicacionales” se habían “gastado 69 millones, cuando había aprobado 18 millones”.

Asimismo afirmó que han “advertido inconsistencias en precios de compra de ciertos productos”.

En continuidad con Gómez Alvariño, el vecinalista Pablo Losada aseguró que el pasivo del año pasado fue de 933 millones de pesos.

En respuesta, el oficialista Daniel Armella justificó que “las modificaciones presupuestarias han tenido objeto para el sostenimiento de servicios esenciales como la salud, seguridad, asistencia social y necesidades extraordinarias derivadas de contingencias que no han podido ser previstas”.

“Son una función normal de la administración del ejecutivo. El 100% de los servicios de salud publica son municipales. El 75% de los recursos de libre disponibilidad son de origen municipales”, explicó

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Gómez Alvariño volvió a tomar la palabra para marcar que “el tribunal de cuentas sancionó al intendente por incumplimientos con cargos pecuniarios y multas por 524 millones entre el 2014 y 2017”.

Por su parte, el presidente del bloque del Frente de Todos, Angel Cammilleri, comentó que “el tribunal de cuentas ha aprobado las rendiciones de cuentas sin observaciones de significancia” y que “realiza lo controles día a día”.

“Entendemos que el gobierno municipal ha actuado correctamente. Hubo superávit de 328 millones. Establecimos en el presupuesto del 2020 que se iba a invertir en las áreas que más se necesitaran y se aprobó sin pandemia, pero los gastos sucedieron con pandemia”, explicó.

El edil oficialista sostuvo que “esto hizo necesario que se incrementaran partidas, porque en áreas donde había un presupuesto determinado en Salud, Desarrollo Social, Obras Públicas y Seguridad, y hubo que modificarlo”.

“Por eso el presupuesto inicial no coincide con la realidad ejecutada en el 2020”, cerró.