San Martín pisó fuerte en el arranque del Clausura. En una especie de “revancha” de lo que había sido la derrota en el Apertura ante el Ferroviario, los de Burzaco lograron un triunfo por la minima diferencia, en el epílogo del encuentro. En un partido que no tuvo muchos condimentos, el azul pegó en el momento justo y puede festejar.

En el arranque del partido, ninguno de los dos mostraba prevalecer. Con pocas chances de peligro, los dirigidos por Ferlauto tenían la novedad de Nahuel Barboza haciendo su estreno como titular, después de su polémica salida de El Porvenir.

Sobre los 30 minutos, el azul tendría la más clara en los pies de Iván Lecszuk, pero Sebastián Anchoverri descolgaba del ángulo su disparo. Por su parte, Midland insinuaba más de lo que concretaba y el “ruso” Scurnik tenía una tarde tranquila.

En el complemento, el local salió con un planteo más ofensivo, aunque sin demasiadas ideas. Se esperaba mucho más de Maximiliano Antúnez, pero no aparecía en la generación de juego.

San Martín proponía buenas asociaciones en mitad de cancha a través de Barboza, Lucas Chiapparo y Agustín Figueroa. Sin embargo, Lautaro Nuñez y Nicolás Slimmens quedaban inconexos, no les llegaba la pelota.

De todas maneras, y cuando parecía que el partido iba a morir en empate, llegó la alegría para los de Burzaco. Un centro de Adrián Acevedo desde la derecha, encontró la falla en la defensa del Ferroviario, y la pelota le quedó servida a Slimmens para vencer a Anchoverri con un tiro bajo.

A cinco del final, San Martín se quedaba con el premio máximo sin hacer mucho. Así es el fútbol, no hay que desperdiciar las chances ocasionadas. El azul fue pura efectividad y se llevó tres puntos importantes.

Con este triunfo, los de Burzaco arrancaron el Clausura con el pie derecho. Fue la primera victoria para Cristian Ferlauto en su tercera etapa en el club. De esta manera, San Martín acumula dos encuentros sin perder (1 victoria y 1 empate). En la próxima jornada recibirá la visita de Luján.