Por: Diego Lanese

La muerte de Mario Meoni en un accidente automovilístico generó un terremoto en el sector transporte. El ministro había logrado una buena relación con los actores del sector, en especial con los gremios, que querían a alguien cercano a ellos en ese lugar, pero que con el tiempo lograron aceitar una buena sintonía con el ex intendente de Junín.

 

La situación generó alguna expectativa en torno a su reemplazante, pero como sucedió con la Superintendencia de Servicio de Salud (SSS), la Casa Rosada decidió darle continuidad a la línea establecida, y nombró a Alexis Guerrera como nuevo titular de la cartera. A partir de esto, el funcionario tiene una agenda de desafíos en el horizonte, en el marco de una agenda sindical compleja. El conflicto de los choferes, la hidrovía y algunos conflictos puntuales, como el de Latam, son parte de este entramado de temas a resolver en el corto plazo.

El presidente @alferdez tomó juramento al nuevo ministro de Transporte @AlexisGuerrera ¡Bienvenido! #ArgentinaUnida pic.twitter.com/TivbnGJaXz

— Ministerio de Transporte (@MindeTransporte) May 3, 2021

 

Guerrera llega a la cartera de transporte con varios temas irresueltos por la gestión anterior, en especial una serie de reclamos gremiales que amenazan con aumentar su intensidad. Una cuestión clave es la paritaria de los choferes de colectivos, que podría dejar sin transporte a la zona del AMBA en horario nocturno.

 

Es que la cuestión no sólo está centrada en la discusión salarial –que esta semana pasó a un cuarto intermedio –sino que está entrelazada con la cuestión de los subsidios. Las cámaras empresariales quienes que haya un aumento de los recursos para suplir la caída del “corte de boletos”, que por la pandemia hicieron que se achiquen las ganancias.

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Como informó Política del Sur esta semana, la paritaria de los colectiveros está condicionada por la interna gremial de la UTA, las presiones de las empresas por más recursos y los problemas que tienen el ministerio para terminar de ajustar el mecanismo de subsidios, clave para sostener el servicio.

 

“Hoy, por cada colectivo que tiene la línea el estado paga tres salarios de sus trabajadores, además del precio diferencial del gasoil o la renovación de unidades, que las cámaras aseguran que pagan ellos”, sostuvo una fuente cercana a la negociación. En esta discusión, al UTA se encuentra en clara minoría, por dos razones.

 

Una, las cámaras empresariales, que históricamente estaban divididas, decidieron dejar de lado sus diferencias para sumarse a esta “cruzada”, y firmaron todas el documento que adelanta la posibilidad de cortar el servicio nocturno. Además, la figura de Roberto Fernández sigue sufriendo cuestionamientos internos, de sectores que no están de acuerdo con su conducción.

 

Despidos en Latam

 

Además, hay conflictos abiertos en el sector, que Guerrera heredó de la gestión de Meoni, y que requieren su intervención. Uno de ellos es el de la aerolínea Latam, cuya oficina argentina cerró al inicio de la pandemia, generando un conflicto con cerca de 2 mil trabajadores locales.

 

De ellos, una mayoría aceptó retiros voluntarios, pero unos 200 fueron despedidos este año, y mantienen el reclamo. Varias veces se reunieron con el anterior ministro, que había asumido el compromiso de dialogar con otras empresas del sector para reinsertar a los cesanteados, una promesa que esperan se mantenga.

 

Por esto, los despedidos fueron a Casa Rosada el día de la jura del flamante titular de transporte, y esperan tener una relación aceitada en el futuro.

 

“Presentamos un escrito para retomar el contacto con el ministerio, y reflotar el compromiso de que nos reincorporen a la industria aerocomercial a través de otras empresas, como prometió Meoni”, le dijo a Política del Sur Martín Tomé, delegados de los despedidos de Latam.

 

Durante los 14 meses de conflicto en Latam, hubo algunas promesas del gobierno, y la mayor esperanza es que el personal despedido sea reabsorbido por otras compañías. “Queremos mostrarse al ministro que el conflicto sigue vivo, que está latente, y que está el compromiso del ministerio y Casa Rosada de recibirnos”, recalcó el delegado. Sobre la figura de Guerrera, Tomé explicó que “nos esperanza que tiene mucho apego a la cuestión de género y la diversidad, que es un punto central en el conflicto de la empresa, ya que dada las características de la composición de nuestro sector, en especial en tripulantes de cabina, donde la mayoría son compañeras mujeres”.

 

Hidrovía

 

Otro tema que deberá afrontar rápidamente el flamante ministro es el tema de la hidrovía Paraguay-Paraná, cuya concesión se venció y se extendió de manera provisional, en busca de una medida de fondo que termine de destrabar la cuestión. Apenas asumió Guerrera afirmó que “no se estatizará” la vía navegable, lo que generó decepción en varios gremios. Tras la asunción, el nuevo ministro aseguró que no se estatizará la Hidrovía Paraná-Paraguay sino que recuperará “un rol que hoy no tiene en el manejo”, a través de los próximos pliegos de licitación para la concesión del servicio de dragado y balizamiento. De esta forma, mantendrá la tarea que se viene realizando hasta el momento en esta vía de salida para el grueso de las materias primas argentinas.

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Hay gremios que piden recuperar el manejo de este recurso, y recordaron que hay 800 puestos de trabajo en juego. La prórroga de la concesión por 90 días la tomó Gabriel Katopodis, ministro de Obras Públicas, cuando estuvo a cargo temporalmente de la cartera de transporte, lo que evito que Guerrera asuma y tenga que dar ese paso. La no estatización adelantada tiene respaldo de algunos dirigentes sindicales. El Secretario General del Centro de Patrones y Oficiales Fluviales de Pesca y Cabotaje Marítimo, Julio González Insfrán, aseguró que “estatizar en este momento sería una irresponsabilidad y una improvisación feroz”. “Montar una empresa estatal que tenga la infraestructura necesaria para mantener el dragado es como crear una nueva YPF, hay que invertir en preparar gente, en planificación y en vacaciones. Porque el río cuando lo dejas de dragar lo llena rápidamente el canal, los barcos no pueden descargar y eso afecta directamente el comercio exterior”, explicó al programa radial de Política del Sur.