Una joven de 21 años que padecería de trastornos psiquiátricos, fue encontrada ahorcada con una sábana en la casa de un hombre acusado de asesinarla y simular un suicidio, que fue detenido tras los testimonios de la familia de la chica, que afirmaron que sufría violencia de género. 

El presunto femicidio se conoció el viernes a la tarde en el interior de una vivienda de la localidad de Villa Caraza, ubicada sobre la calle Yerbal al 3300, entre Estados Unidos e Islandia, propiedad de un sujeto de 47 años que contó que mantenía “una relación casual” con la fallecida. 

Fuentes policiales informaron a Política del Sur que personal de la Comisaría 9° del partido de Lanús tomó conocimiento del hecho a raíz de un llamado al 911 del tipo identificado como Ariel Alberto Martínez (47). Al hacerse presentes en el escenario de lo ocurrido, los efectivos se entrevistaron con él, quien advirtió que había encontrado muerta a la joven al regresar de su trabajo como repartidor en la Ciudad de Buenos Aires. 

Según el relato del sospechoso, este habría pasado a buscar por su trabajo a presunta víctima, Milagros Orieta y llegaron a su domicilio cerca de las 17 horas. 

Martínez dijo que al día siguiente, pasadas las 6 de la mañana, se fue a trabajar y regresó alrededor de las 12.30, cuando se encontró con el cadáver. Milagros estaba arrodillada con sabanas en el cuello, señalaron los voceros a este medio. 

Peritos de Policía Científica establecieron que el posible deceso fue por asfixia mecánica con una sábana anudada al cuello y atada por su otro extremo al rincón de la puerta. 

Las pesquisas determinaron que no había signos de violencia en la puerta de ingreso o ventanas ni tampoco había faltantes de elementos de valor. Incluso en la cartera de la víctima secuestraron unos 30.000 pesos. 

De acuerdo a lo advertido por las fuentes del caso, la joven estaba medicada debido a que padecía de trastornos psiquiátricos y aunque todo indicaba de que se trataba de un suicidio, los familiares de Milagros aseguraron de que padecía de violencia física y notaron lesiones en su cuerpo en varias ocasiones. 

Por ende, el resultado de la autopsia será clave para determinar la culpabilidad del acusado, que el sábado se negó a declarar en la fiscalía. 

Por su parte, personal policial secuestró en el lugar varios blíster vacíos de medicación psiquiátrica y teléfonos celulares para ser peritados. 

El hecho es investigado por la fiscal María Soledad Garibaldi, titular de la Unidad Funcional de Instrucción (UFI) 8 Especializada Violencia de Género y Familiar del Departamento Judicial Avellaneda – Lanús.