Por: Leonel Manganielo

Luego del lanzamiento del “Operativo Sol”, desde la Policía Bonaerense manifestaron su malestar por el dinero destinado al despliegue policial durante la temporada de verano y esto se suma a un clima tenso que se vive hace rato y que tuvo su pico máximo en la revuelta que se dio durante septiembre del 2020.

“Es un tema que vemos con preocupación, obviamente tratando de esperar que el Gobierno de la Provincia tome nota de esto y no se llegue a una situación cómo la que vivimos el año pasado, pero en este caso está claro que ya el Gobierno provincial no tiene excusas para no dar respuestas porque, en una maniobra que nosotros hemos reprobado, le han quitado fondos a la Ciudad de Buenos Aires y se supone que ya cuenta con todos los recursos para que estas situaciones no se generen”, afirmó a Política del Sur el senador bonaerense por Juntos por el Cambio Andrés De Leo.

En esa sintonía, sostuvo que “la política de seguridad en la provincia es más un panfleto publicitario que acciones concretas” y consideró que “la gestión del ministro de Seguridad bonaerense, Sergio Berni, demostró que no está a la altura de la circunstancia”

“En los casos más importantes demostró que no ha podido dar respuestas efectivas y que con el tema de la crisis policial ha tenido una de información y desconexión con la fuerza policial y los interlocutores, lo cual está generando esta situación tan delicada”, añadió el legislador que integra la Comisión de Seguridad en el Senado provincial.

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Además, enfatizó que “si ya con los recursos, que provienen de un castigo político a la Ciudad en un acto de discriminación, pasan estas cosas, se está demostrando que esa inoperancia que hubo en el 2020 continúa aún hoy”.

Restricciones

Por otro lado, el presidente de la Coalición Cívica ARI se refirió a la posibilidad de que tanto el gobierno nacional cómo el provincial determinen la vuelta de algunas restricciones para controlar la curva de contagios y opinó que el ejecutivo “sigue en el marco de la improvisación que mantuvo durante todos los meses de la pandemia”.

“Vamos de improvisación en improvisación, no hay un plan de acción ordenado. No lo hubo durante la cuarentena ni para la salida y volvemos siempre a acciones que son espasmódicas. Un gobierno que prohibió las clases presenciales, acción que no se corroboró en países donde hubo una respuesta adecuada a la pandemia y se autorizó por ejemplo bingos y casinos. Un gobierno que le prohibió a miles de argentinos poder estar cerca de sus familiares y estar en los momentos finales, pero permitió y organizó un sepelio caótico en la Casa de Gobierno para Diego Maradona”, criticó.

Asimismo, sostuvo que volver a poner restricciones “probablemente termine de asestar un golpe letal a una economía en general, pero en particular al turismo que ya estaba atravesando una situación difícil”. También afirmó que “el gobierno perdió autoridad a la hora de tomar medidas porque no tuvo un plan, porque utilizó la pandemia con fines políticos y porque se enamoró de la cuarentena”.

“Un gobierno que pierde autoridad es el principal problema que tenemos hoy por errores y decisiones erráticas. También tenemos que hablar de que hay una fuerte interna del gobierno vinculado a que Cristina Fernández con su finalidad de obtener impunidad e incidir en la Justicia, está desautorizando y deslegitimizando al presidente permanentemente y esto es también hay que ponerlo dentro del marco de la pérdida de autoridad”, concluyó De Leo.