El martes a la noche, la violenta muerte de un hombre de 32 años asesinado a balazos despertó la ira de los vecinos a La Morita, un humilde barrio de la localidad de El Jagüel, donde los allegados de la víctima quisieron hacer justicia por mano propia y quemaron la casa de los familiares del presunto agresor, a modo de venganza. 

Fuentes policiales indicaron que Leonardo Francini (32) habría sido interceptado por un grupo de sujetos en la intersección de Roca y San Felipe, que lo balearon y huyeron de la zona a bordo de un auto. Mientras los acusados permanecen prófugos, los investigadores sospechan que el fallecido conocía a sus agresores y el móvil de un ajuste de cuentas vinculado a la venta de drogas sería la principal hipótesis del caso. 

Tras recibir un impacto de bala en el pecho que más tarde le quitó la vida, Francini fue llevado de urgencia al Hospital Sofía Santamarina de Monte Grande, donde falleció como consecuencia de las heridas.  

Al enterarse de lo ocurrido, gente del barrio habría reaccionado de manera violenta y habría tratado de linchar a la familia del supuesto autor material del asesinato. A raíz de ello tuvo que intervenir personal policial de la Comisaría de El Jagüel junto a una dotación de bomberos que asistieron al lugar para apagar las llamas. 

Por ahora, la causa permanece caratulada como “homicidio” y se encuentra a cargo de la Unidad Funcional de Instrucción (UFI) 2 descentralizada de 2 de Esteban Echeverría, dependiente del Departamento Judicial de Lomas de Zamora, a cargo de la fiscal Verónica Ciffarelli.