El representante de la asociación Comerciantes Unidos de Esteban Echeverría Ezequiel Barquín contó a Política del Sur la situación económica para el sector “es muy complicada” porque “hasta que no esté la vacuna no se va a poder trabajar con tranquilidad” y “muchos van a tener que cerrar”.

“Estamos facturando menos de la mitad y se hace difícil afrontar los gastos fijos -de alquiler, de tarjetas, iva e impuestos-, porque ya no hablamos de ganar plata, sino de cómo pagar sin perder el stock de nuestra mercadería. Si bien con la modalidad take away se pudo pagar algunas cuentas atrasadas, pero no todas”, detalló el referente y agregó que “muchos se preguntan si podrán aguantar hasta el año que viene”.

Barquín explicó que “el alquiler de un local en el centro de monte grande está 200.000 en seis meses de inactividad ya hay mas de un millón de pesos en deudas, para pagar eso hay que acortar los costos y en eso hay que reducir el personal. Y los empleados ni siquiera pueden cobrar la indemnización porque el comercio no tiene con qué”.

También remarcó que la crisis del sector comercial “repercute directamente en las industrias que están detrás”.

En cuanto ayuda de las autoridades el representante de la asociación, que engloba mas de 200 locales del distrito, aseguró que se hizo un “pedido de eximición de tasas municipales pero no hubo una respuesta favorable”. Además, cuestionó “los impuestos que agregaron” porque “afectan directamente en el mercado”. “Yo soy textil, y no tenemos precio de tela, y así no se puede trabajar”.

“Sabemos que no es cosa de este gobierno pero son cosas que vienen pasando hace muchos años” comentó.

Por eso pidió “una mano del estado”. “Para no seguir ahogando al comercio el alivio tiene que venir del lado fiscal porque una pyme que cierra no vuelve a abrir mas que en este contexto”

En referencia a la posible apertura de la cuarentena, Barquín entendió que “algunos comercios que pueden tener un repunte son los gastronómicos los gimnasios” y que “eso al sector lo va a aliviar”.