“Hay muchos profes que hace treinta años se dedican a esto y ya colgaron la raqueta”, lamentó Darío Chorbagián, profesor de tenis e integrante del Frente Argentino del Deporte en Movimiento (FADEM), quien lleva adelante una lucha por la vuelta de esta disciplina, de la que viven no solamente quienes están a cargo de los alumnos, debido a que abarca un amplio abanico de ocupaciones.

 

Este domingo, una multitud de profesores y aficionados a deportes que se realizan con cierta distancia física, como tenis, paddle, atletismo, golf, remo, entre otros, se concentraron frente a la Quinta de Olivos para reclamar el retorno de esas actividades en la Provincia de Buenos Aires, un proceso que -a diferencia de CABA-, viene lento.

 

 

 

 

 

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Reunión con @mvassalloa por la actualidad y problemática de clubes de tenis barriales de Zona Sur gracias a @ftefadem por la gestión y en especial a Martín por la buena predisposición y el interes por el Sur del Gba.. A seguir juntos en este momento por la vuelta al Tenis, al trabajo y por la dignidad del Profesor... #aat #tenisargentina #tenis #necesitamostrabajar #deporte

Una publicación compartida de Dario Chorbagian (@dario.tenisfuncional) el 27 Jun, 2020 a las 9:50 PDT

 

 

En diálogo con el programa radial de Política del Sur, Chorbagián aclaró que, si bien FADEM adhiere al motivo de la protesta, no la apoyó porque no comparte el método que se utilizó, en el que no hubo distanciamiento social. “Lejos de estar en desacuerdo con el reclamo por la vuelta al trabajo, no acompañamos porque consideramos que no eran las formas,” indicó.

 

Según explicó el profesor, el problema radica en que “en Provincia quieren que la actividad esté prevista para volver en fase cinco”. Sin embargo, indicó que no se sabe en qué fecha podría ocurrir esa instancia, por lo que el planteo de la Asociación Argentina de Tenis (AAT) es volver en la fase tres.

 

Además, puntualizó que el reclamo por el retorno de la disciplina “va más allá de lo recreativo y de la actividad deportiva de una persona”. “Somos miles de familias que dependemos de esta actividad como fuente laboral, no sólo los profesores, la matriz productiva del tenis es muy grande”, argumentó, y nombró ocupaciones como la de los cancheros, el personal de mantenimiento, de seguridad, administrativos y las concesiones de los clubes chicos, entre otros.

 

 

“Un desconocimiento e ignorancia total”

 

Según contó, la AAT presentó un protocolo que “está aprobado por el Ministerio de Salud de la Nación”, el cual consta de “casi 70 páginas, con una explicación científica hecha por médicos e infectólogos. No son dos locos que se sentaron a escribir cómo podrían hacer para que vuelva el tenis. Es algo que está muy trabajado”.

 

Sin embargo, aseguró que “la respuesta en Provincia a priori no fue buena, más después de los dichos de (Daniel) Gollán, que fueron totalmente desubicados y nos quedamos todos espantados con las cosas que dijo”.

 

Chorbagián se refirió a las declaraciones del ministro de Salud bonaerense, quien consideró al tenis como “una actividad muy riesgosa”, especialmente por la manipulación de las pelotas, que podrían estar en contacto con la transpiración de los otros jugadores, más “los chicos que alcanzan las pelotas”, conocidos como “ball boys”.

 

Por un lado, el profesor de tenis remarcó que “ojalá un profe tenga ball boys, es un desconocimiento e ignorancia total”, y por otro, aclaró que “cumpliendo con dos o tres cositas, es prácticamente imposible contagiarse en una cancha de tenis abierta”.

 

Sumado a ello, planteó: “Estamos muy lejos de ser ese deporte o esa actividad elitista con la que nos tiene estigmatizados la sociedad, que piensa que andamos en autos alemanes y que estamos tostados todo el día por estar al aire libre”. “Se está dando una situación muy dramática y no entendemos cómo todavía no se volvió”, criticó.

 

En este marco, Chorbagián contó que “hay profes que están yendo a buscar bolsones de comida o a ollas populares para tener un plato de comida y otros que tienen la dicha de tener a alguien en la familia que tiene trabajo y los apoya, los banca”. También, aseguró que “hay muchos profes que hace treinta años que se dedican a esto y hoy ya cambiaron de rubro, ya colgaron la raqueta y se tienen que dedicar a algo y no saben a qué porque no saben otra cosa que dar clases de tenis”.

 

En tanto, donde sí el tenis viene teniendo una respuesta positiva es en los municipios. En la zona sur, ya se reunieron con autoridades de Avellaneda, Lanús y Lomas de Zamora, esta semana lo harán con Almirante Brown y Esteban Echeverría, y se está por confirmar Berazategui.

 

En cada encuentro -detalló Chorbagián-, una comitiva conformada por un representante de FADEM, un directivo de la AAT, un profesor y un club de barrio del distrito en cuestión, presenta la problemática, explica cómo es el protocolo y manifiesta su compromiso “a trabajar como agentes de sanidad”. “Somos los primeros que vamos a hacer cumplir el protocolo”, garantizó el profe de tenis. De hecho, también tienen la propuesta de hacer capacitaciones por Zoom a los alumnos con médicos de cada club para interiorizarlos sobre la prevención del Covid-19.

 

Contradicciones

 

Por lo pronto, Darío Chorbagián señaló que “hay una contradicción” en las autoridades que retardan la vuelta del tenis en la provincia, al indicar que, por ejemplo, quien juega al tenis en Avellaneda, donde no está habilitado, puede cruzarse a jugar a Capital Federal, donde sí el tema está avanzado. “Estás generando una circulación mayor que si se abriese”, advirtió.

 

Y concluyó: “Si se vuelve todo para atrás, nosotros acatamos, no somos anticuarentena ni antigobierno ni anti Covid, pero si empezás a abrir comercios, una peluquería donde tenés una persona a 70 centímetros de tu cabeza, ¿cómo no vas a habilitar el tenis? Pensalo desde la matriz productiva, desde lo que le da de comer el tenis a la gente.”