El presidente Alberto Fernández participó ayer de forma remota del plenario de la CTA de los Trabajadores, que encabezó el diputado Hugo Yasky. El encuentro se dio luego de las críticas por la ausencia del sector, alineada con el oficialismo, en el acto del 9 de Julio, algo que el propio mandatario admitió como un error. “Hemos recibido un Estado absolutamente destruido, en condiciones francamente patéticas. Pero nos hemos impuesto la obligación de preservar las empresas y las fuentes de trabajo”, manifestó el Primer Mandatario.

El Presidente consideró que el Estado busca que aquellos que aquel que está trabajando “tenga la tranquilidad de que ayudarán a su empleador a pagar los salarios”.

“No podemos seguir viviendo en ese país. Ese no es un país justo. Nadie que haya abrazado la política puede quedar ausente del debate que supone integrar a todos los sectores de la sociedad a la sociedad argentina. Tenemos que proyectar un país en el que todos estén incluidos”, indicó, y subrayó: “Ustedes no necesitan venir a tocar el timbre. Ustedes son parte de nuestra historia.”

“Fuimos víctimas de un capitalismo que le dio prioridad a lo financiero sobre lo productivo. Y lo productivo tiene que ser lo central. Cuando una empresa empieza a prestarle atención a la timba financiera, el capitalismo empieza a debilitarse”, enfatizó.

Además, expresó: “Gracias por invitarme a ser parte de este plenario. Estamos viviendo un tiempo difícil y único en la Argentina y el mundo. El tiempo nos obliga a repensar el presente y el futuro”, y agregó que “nadie sabe dónde está el final de este tiempo de enfermedad que nos toca enfrentar. Sabemos que debemos dar esta pelea preservando la salud de la gente. No tiene sentido pensar en un futuro donde a las fábricas la gente va a enfermarse”.

Por su parte, Yasky manifestó que “estamos viviendo la pandemia en el continente más desigual, pero con un gobierno que surgió de la unidad, de la resistencia, de la lucha de nuestros pueblos, y por eso es un gobierno distinto, que es capaz de convocar a los trabajadores”, para dialogar y encontrar una salida frente a crisis agravada por el Covid-19.

Asimismo, precisó: “La escena que hay hoy en la Argentina no existe en otros países de América Latina. Y eso lo reivindicamos y no solamente nosotros. Lo reconoce la Confederación Sindical de las Américas (CSA), que dijo en más de una oportunidad ‘en la Argentina hay un presidente que está convocando y dialogando con los trabajadores para salir de la pandemia sin que esto signifique hambre y miseria para su pueblo’. Y la Confederación Sindical Internacional (CSI), que dijo ‘apoyamos al gobierno de Argentina en la discusión con los acreedores externos. Apoyamos el punto de partida de los negociadores del gobierno, que es no aceptar nada que signifique más ajuste, más padecimiento’”.