Esta semana, el intendente de Esteban Echeverría, Fernando Gray, apuntó contra la titular del PRO y exministra de Seguridad, Patricia Bullrich, al considerar que “esta señora está convocando por las redes, está tratando de agitar, a través de sus referentes locales, a que los comerciantes se manifiesten en la puerta del Municipio”.

Tales declaraciones no cayeron para nada bien en el entorno macrista, y uno de los referentes del espacio en La Matanza, Alejandro Finocchiaro -exministro de Educación- salió al cruce de las palabras del también vicepresidente del PJ bonaerense.

“Cuando uno declara tiene que ser responsable. Si el intendente Gray tiene pruebas concretas, lo que tiene que hacer es presentarlas y no sumar incertidumbre a la incertidumbre general” , disparó, en diálogo con Política del Sur.

Asimismo, consideró que “tampoco se puede tapar el sol con la mano”. “Nadie fogonea al dueño de un tallercito, de una pyme, al dueño de un bar o tienda de electrodomésticos o ropa que hace tres meses que no puede trabajar. El problema real no necesita ser fogoneado”, consideró Finocchiaro.

Sobre el ASPO y la necesidad de habilitar actividades

Previo a la extensión de la cuarentena hasta el 28 de junio, Finocchiaro consideró que “lo que deben atender el gobernador Axel Kicillof y el presidente de la República (Alberto Fernández) es el reclamo de muchos intendentes del Conurbano, sin distinción de partidos políticos, que están pidiendo alguna flexibilización con un argumento que es imbatible”, ya que “ellos conocen la realidad de sus territorios”.

“Más teniendo en cuenta que el Gabinete provincial, salvo el ministro Sergio Berni, no es un equipo que conozca la provincia de Buenos Aires”, agregó.

En este sentido, instó: “El Presidente y el Gobernador deben escuchar más voces que las que están escuchando”. “Alberto Fernández también se tiene que hacer cargo de la angustia de la gente, tiene que mostrarle a la gente una visión de salida de esto, un plan de salida”, remarcó el exfuncionario macrista.

A su entender, “hay que salir de la trampa cuarentena o anticuarentena, vida o muerte”. “Nadie está a favor de la muerte. Hay un consenso importante en nuestro país con respecto a la ASPO (aislamiento social, preventivo y obligatorio), nadie quiere salir de un día para el otro de la misma. No obstante, lo que necesita la sociedad es ver que el Gobierno, además de estar en control de la situación, así como planteó el ingreso, tiene que plantear posibilidades de salida, por lo que  el enfoque tiene que ser multidisciplinario”, sostuvo Finocchiaro a este medio, al remarcar que “no se puede trabajar sólo con los epidemiólogos”.

Los brotes en las villas

Por otra parte, el referente del PRO manifestó sus inquietudes en relación al brote de contagios en los barrios populares del Conurbano. “Tenemos que tener una preocupación evidente por esto. Estamos hablando de villas, y lo que está exponiendo la pandemia son un montón de carencias y ausencias del Estado durante décadas y décadas. No está para eso con eufemismos”, expresó.

En este sentido, el exministro consideró que “lo que se hizo mal es que el Estado se haya ausentado y no haya trabajado para solucionar estos problemas urbanizando lo que tiene que urbanizar”. “El gran problema de las villas es que no hay agua potable, no hay cloacas ni asfalto. La gente vive en condiciones horrorosas”, lamentó.

Para Finocchiaro, “lo que hay que hacer es ir al problema de fondo porque esto que está desnudando la pandemia debe servir para que de una vez por todas entienda que el cemento no se come pero hace que la gente viva mejor”.

E insistió: “No hay que seguir este tipo de asentamientos. Basta de `villas azules´”. “Hay que parar de promover asentamientos o que la pobreza siga siendo un arma de la política para ganar elecciones”, sostuvo, al apuntar contra el signo político que más tiempo gobernó desde la vuelta de la democracia, es decir, el peronismo.

“Si hubo un espacio político que gobernó el 90 por ciento del tiempo, tiene el 90 por ciento de la responsabilidad”, expresó.

Rechazo a las críticas a Vidal

Por último, rechazó los cuestionamientos de los dirigentes del Frente de Todos a la política sanitaria de la exgobernadora bonaerense, María Eugenia Vidal. “Cuando nosotros asumimos, había 53 hospitales en la provincia de Buenos Aires que estaban con peligro edilicio, en lugar de seguir inaugurando cáscaras vacías porque cuatro paredes no hacen un hospital, sino también los profesionales y la aparatología que tienen adentro”, explicó.

“Lo que dijo Vidal fue que tenemos que trabajar en arreglar los que están, y por ello planteó un plan para arreglar todas las guardias”, sostuvo, al mostrar sus inquietudes sobre los planteos del gobernador Kicillof y cercanos.