Ante un escenario impensado provocado por el coronavirus, con una cuarentena que paralizó la industria, el comercio y, con ello, la recaudación municipal, los intendentes de la provincia de Buenos Aires fueron a pedir auxilio a la Gobernación. En la fila para la ventanilla en La Plata, se mezclaron alcaldes del Frente de Todos con los de Juntos por el Cambio, así como los del interior con los del Conurbano.

En una primera reunión con los jefes comunales, el gobernador bonaerense, Axel Kicillof, prometió, de unos 5.600 millones provenientes de las arcas nacionales, 4.000 millones por municipio. Lejos de los 9.000 millones que pidieron los intendentes.

De esos 4.000 millones, mil millones se repartieron a través del Coeficiente Único de Distribución (CUD).

Si bien señalábamos que ante la situación de crisis económica y sanitaria las realidades eran similares para oficialistas y opositores, las desconfianzas subsisten. La forma del reparto de los restantes 3.000 millones por fuera del CUD alertó a los alcaldes macristas. Voces cercanas de una administración amarilla temen que Kicillof distribuya “a criterio” suyo, privilegiando a los intendentes peronistas. Es decir, apelando a una frase de Juan Domingo Perón, que al enemigo no le dé ni justicia.

Nos reunimos con los intendentes @FerEspinozaOk, @gustavomenendez, @Nardini_Leo, @fernandogray, @jorgeferraresi, @ArielSujarchuk, @MarioSeccoOk y @CascallaresPJ para analizar la situación económica de cada municipio y cómo administrar la cuarentena focalizada. pic.twitter.com/TMFPtFyhfZ

— Axel Kicillof (@Kicillofok) April 21, 2020

El lunes, el Gobernador recibió a intendentes de la oposición. Según se pudo saber, en Juntos por el Cambio quedó la sensación de que Kicillof “bajó los decibeles” con respecto a los primeros encuentros en los que pidieron dinero a la Gobernación. Sobre todo, destacaron que el jefe provincial quedó en que iba a pelear por un poco más de fondos para los municipios.

Quizás el exministro de Economía habrá cedido en algunas cosas, pero en las distintas reuniones con los alcaldes tuvo que ponerse firme en algunas cuestiones. “Los intendentes, rápidos, no querían devolver la plata y le dijeron que no”, señalaron.

También, el mandatario bonaerense descartó de plano la posibilidad de que las comunas posterguen “las deudas que tienen los municipios con el Banco Provincia”

Lo cierto es que quedó un compromiso del Gobernador de contar con un nuevo desembolso de dinero para mayo. “Para abril tenían en la alcancía, pero para el mes que viene ya se les complica”, indicaron desde una gestión opositora.

Si bien en el caso de los opositores, Kicillof ofreció buscar más fondos, se verá si esa promesa se puede acercar a los 9 millones que solicitaban los intendentes. Necesitan eso para mantener los sueldos y toda la creciente demanda de una pandemia global y una economía en parálisis. Mayo dirá si los ruegos de los intendentes tendrán efecto en La Plata.